miércoles, 31 de mayo de 2023

Mario Arteca (La Plata, Argentina, 1960)

 

MAO EXPLICADO XVIII

“No se tiene miedo de algo de lo que se es mucho más fuerte.”
“La Divina Mímesis”, Pier Paolo Pasolini 
 
*
Fue hasta allí, y le dijo: “Bien, para conocer hay que participar
en la práctica que transforma la realidad. Y si la tarea es cruzar
un río, ¿no podemos hacerlo sin un puente o una embarcación?”.
Sentir lo que sucede cuando tomo estas cosas del mundo –sí,
esas mismas–: este urinario o lo que sea, el pelapapas oxidado
y abandonado en la cocina, donde el gato del vecino jugaba
a rasurarse el bigote para experimentar de una vez cierta dosis
de desorientación, etc. Para conocer, hay que participar.
Pero, mientras la cuestión del método no esté resuelta, será
inútil hablar de nuevas tareas, donde es imposible cumplir
lo mínimo, si al menos alguien se mostrara dispuesto a esforzarse.
“¡Taxi!”. Lléveme adonde el sol se pone gordo y rojo –aunque
no tanto, porque ya no quema como entonces–, y cada línea pasada
casi que superó el límite de su papel y, sin embargo, es un pasado
tan delgado como la hoja que lo recubre, no la cosa en sí misma.
Toda historia es una historia de lo que no funciona de inmediato,
y esta no será la excepción. Ah, escuchá su modo de contarla.
Parece interesante, ¿verdad? No obstante, en aquel momento
comprendí lo mucho que nos acostumbramos a pasarla bien,
a veces muy bien. ¿Es que ciudades como ésta también arrastran
su tiempo de incontinencia? De todos modos, cualquiera que haya
vivido solo conoce hasta dónde el monólogo está en la naturaleza
del hombre, ¿no? De hecho, no estamos obligados a nada –salvo
a dirigirnos la palabra, claro–; aunque, desde ya, tampoco estamos
obligados ni siquiera a eso. Es necesario comprometerse más allá
del adulterio de la razón, decía un expatriado; y entonces, habrá
una especie de beatitud, e idénticos focos de incendio donde lucirse
en combate, cuando creías mantener a resguardo algo de lo nitroso
mientras aún durase la adolescencia, y así sucesivamente; y no
decir una palabra de más en el transcurso de ese tiempo. Y a todo
esto ¿para qué tanto, si muchas veces nos quedamos atrás sin reparar
para lo que nunca tuvimos ojos? “Sábado/Sábado/ Sábado 4 p.m”:
el tiempo parece significar algo como “la hora del conflicto social”.
“En efecto, los conductores están peleándose por el retraso que
cada uno le está costando al otro. Y nadie quiere pagar”. ¿Taxi?
 
31 de mayo de 2023

No hay comentarios:

Publicar un comentario