lunes, 31 de mayo de 2021

Inma Luna (Madrid, España, 1966)

 

 

Olisqueo en el rastro.

Late el carbón debajo de la tierra

aquel que se extraía arrancando la roca

cavando zanjas minas explotando las grietas

hasta partir en dos los cerros.

No hay compasión alguna en el despojo,

Olisqueo en el rastro.

El cerdo sí sabe de la trufa

la rebusca en su hocico

mugriento y exquisito

remueve el barro respirando la greda, se la traga

sin asco.

 

Olisqueo en el rastro.

Yo sé que la poesía sabe de esto

que nos ocurre.

Me enfango en la tarea cruda y descomunal

de exhumar la palabra precisa.

 

 

—————————————————

 

 

Escribo este poema

como si recogiera los pelos de la ducha

como si me estuviese triturando

como si no supiera pronunciar la palabra escondite

o pensara que así

se podría aliviar este dolor de estómago

esta oquedad de aquí, en el centro de todo.

Sabes lo que nos pasa?

que no tenemos ni la menor idea de las cosas

que vamos por ahí pegando tumbos

riéndonos cuando todo nos daña

buscando precipicios por lo que todo esto nos merezca la pena.

 

Ahora

miradme

miradme en el intento de decir algo útil

en el fracaso permanente de mis dedos

que os buscan

a tientas

como si de verdad estuvieseis aquí

como si cada verso fuese alguien que escucha

en vez de posos de café

líquido que se estanca

restos de lagartijas moribundas.

 

Escribo este poema

como si no tuviese nada que contaros

como si me estuviese deshaciendo.

 

 

—————————————————

 

 

La poesía mira al campo

la poeta mira al campo

al campo de trabajo

al campo de exterminio

campo de fresas

campo de minas

o de concentración

al campo de batalla

al campo de cultivo

campo de refugiados

campo

de

tiro

La poesía mira al campo

la poeta

dispara.

 

 

 


Edificio Nautilus

 

               Ediciones de Baile del Sol

 

               (Fuente: Papeles de Pablo Müller)

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario