Flores blancas
Flores blancas llovieron sobre Buenos Aires la noche en que nació
Juan
Arias. Las vieron muchos, las olieron menos. Que fuera porque
él nacía,
quién pudo saberlo. Ni su madre, que no las vio,
aparte de morir
enseguida.
Alguien en un departamento solitario las pudo ver bajando
por la noche. Se dijo ¿quién nace? o ¿quién muere? Nada más.
Ya está dicho, nació Juan Arias. De su vida poco puede agregarse.
Rico,
hubiera hecho papel de caballero. Pero fue pobre. Era
considerado un
tonto, aunque de gran belleza.
En la vejez le dieron el trabajo que juzgó más apropiado a su persona:
ubicar autos en la Diagonal. Lo hacía con cuidado, como todo.
Murió allí, una noche. Suavemente, a pesar de la lluvia.
(Fuente: Biblioteca Ignoria)

No hay comentarios:
Publicar un comentario