Este poema es la reacción violenta
que pudiera tener
si explotara
.
Esta / mi potencialidad.
.
Esta / la débil fuerza que me propulsa.
.
Este / mi cuerpo kamikaze.
.
Esta / la acaso pulverización
de los fonemas
que callé
,
por discreción
por civilidad
por miedo
¿a qué?
¿a quién?
Estoy sentada en la sala de psicopatología junto a una muchachita de ojos grandes.
La noche no la duerme y ha tragado -pobre gañote- varias pastillas de seconal. La miro irse, la dejo irse y no saber volver. La miro entregar el cuerpo al sueño luego de haber lisonjeado a
Lichtenberg.
Si tu destino es partir
hazlo ahora.
.
Si tu destino es no volver
olvida el camino
de regreso.
.
Mañana
la humedad podría amojosarte.
.
Mañana
el silencio podría tar / ta / mu /de /arte.
.
Mañana
para todo, en fin, podría ser
demasiado tarde.
*
No es fácil decir Yo
Rasgarse
las vestiduras.
.
Romper la urdimbre
y tras la trama secreta
mostrar el cuero lacerado
.
No es fácil decir Yo.
.
Asumir la propia ridiculez. Esa fatalidad
de la que, sin embargo, se vuelve
una y otra
vez.
.
No es fácil decir Yo.
.
Confesar la versión
del propio crimen
alevoso / doloso
de sí mismo.
.
No es fácil decir Yo.
.
Dejarse
conducir
mansamente hacia el patíbulo
ungidos ya y san / tificados
por la Muerte.
.
.
¿Para qué?
¿Para quién?
.
.
(Mira en derredor el espectáculo de todos esos
Yoes procrastinados
para el Más
Allá).
.
.
(Del pòemario inédito "Nadie te va a creer", 2023)
(Fuente: Alejandro Méndez Casariego)
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