No morir en cama
He decidido no morir en cama
por muchas cosas importantes,
porque tengo malos recuerdos de cama,
y porque existe el mar, por ejemplo,
el mar que tiene un cinturón de espuma
de cien metros o más
de ancho algunos días,
uno, dos, tres, cuatro,
cinco rompientes
para caerse y levantarse,
tan seguidas que ni hombre ni mar
hallan instante
de arrojar la herradura
de espuma de sus hombros,
celda de espuma, sello
que al fin salta en pedazos.
(...)
En: Plaza Batallón 40
Obra completa, Ediciones del Dock
(Buenos Aires, 2022?)
Fragmento de "No morir en cama"
Ediciones del Dock
(Fuente: Santiago Rebasa)
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