PARADO,
hablando como un dios, no siéndolo.
Ni esta forma ni esa luz le pertenecen.
Hablando. Soy el dios
de un cielo vacío como un huevo
vacío. Mi piel el revés del cascarón
donde la vida ardía.
Anótalo en tu libro.
Yeso, oro, viejos ocres, luz vertical.
Absurdo fuera no festejar este tesoro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario