El asunto
Algunos hombres rompen tu corazón en dos…
Dorothy Parker, Experiencia.
Dorothy Parker, Experiencia.
Algunos hombres dicen tu nombre como un tic- verbal.
Algunos hombres te estampan una sobrecarga emocional por cada encuentro erótico.
Algunos hombres son enfermos mentales leves y están pensando en ir a un gimnasio.
Algunos hombres han dado vuelta la página y no pueden ser seducidos, ni siquiera en los bares de ensueño donde los encontraste.
Algunos hombres que eran jóvenes tienen ahora la edad que tenías entonces.
Algunos hombres no se contentan con un mero daño, tienen que quemarte por completo.
Algunos hombres a los que redujiste a cenizas están finalmente sacudiéndose el polvillo.
Algunos hombres están hechos de fibra de vidrio.
Algunos hombres tienen agujeros profundos perforados por una guerra, no podés llenarlos.
Algunos hombres son delicados y están rotos.
Algunos hombres te robarán tu brazalete si les permitís pasar la noche.
Algunos hombres querrán cojerse tus poemas, y en vez de eso, te encontrarán a vos.
Algunos hombres dirán: “quisiera ver cómo lucís cuando llegás” y luego llamarán a un taxi.
Algunos hombres son una lista de ingredientes sin receta.
Algunos hombres nunca te ven.
Algunos hombres te vendarán los ojos durante el sexo, y luego secretamente se pondrán stilettos.
Algunos hombres se probarán tus medias de red negras en un hotel en Roma, o te atarán con film plástico a un poste en Nueva Orleans.
Algunos de estos hombres valdrán la pena.
Algunos hombres escribirán reseñas confusas y condescendientes de tu trabajo, recordándote estas líneas de Frank O’Hara:
No puedo pensar en vos/sino como lo que eres: el asesino/ de mi huerto.
Algunos hombres, enfrentémoslo, son realmente muy pequeños.
Algunos hombres son muy grandes, pero eso no es usualmente un factor no negociable.
Algunos hombres no tienen uno en absoluto.
Algunos hombres te abofetearán de una forma que te gustará.
Algunos hombres querrán meterse dentro tuyo hasta morirse.
Algunos hombres nunca se hacen cargo.
Algunos hombres te darán sus corazones como folletos,
y los corazones de algunos hombres parecen dar vueltas por siempre:
los ves en las noches despejadas,
puntos brillantes entre las estrellas, y esperás a que se salgan de órbita para que caigan en la tierra.
The Matter
Some men break your heart in two…
—Dorothy Parker, “Experience”
—Dorothy Parker, “Experience”
Some men say your name like a verbal tic.
Some men slap on an emotional surcharge for every erotic encounter.
Some men are slightly mentally ill, and thinking of joining a gym.
Some men have moved on and can’t be seduced, even in the dream bars you meet them in.
Some men who were younger are now the age you were then.
Some men aren’t content with mere breakage, they’ve got to burn you to the ground.
Some men you’ve reduced to ashes are finally dusting themselves off.
Some men are made of fiberglass.
Some men have deep holes drilled in by war, you can’t fill them.
Some men are delicate and torn.
Some men will steal your bracelet if you let them spend the night.
Some men will want to fuck your poems, and instead they find you.
Some men will say, “I’d like to see how you look when you come,” and then hail a cab.
Some men are a list of ingredients with no recipe.
Some men never see you.
Some men will blindfold you during sex, then secretly put on heels.
Some men will try on your black fishnet stockings in a hotel in Rome, or Saran Wrap you to a bedpost in New Orleans.
Some of these men will be worth trying to keep.
Some men will write smugly condescending reviews of you work, making you remember these lines by Frank O’Hara:
I cannot possibly think of you/other than you: the assassin/of my orchards.
Some men, let’s face it, really are too small.
Some men are too large, but it’s not usually a deal breaker.
Some men don’t have one at all.
Some men will slap you in a way you’ll like.
Some men will want to crawl inside you to die.
Some men never clean up the matter.
Some men hand you their hearts like leaflets
and some men’s hearts seem to circle forever: you catch sight of them on clear nights,
bright dots among the stars, and wait for their orbits to decay, for them to fall to earth.
Versiones de Marina Kohon
(Fuente: Op.cit.poesía)
No hay comentarios:
Publicar un comentario