DOS POEMAS
Setenta y siete las falsedades de la planta
Yo que he lavado todas las cosas
con el único fin de tenderlas bajo un sol inmutable:
partes de cuerpos, simulacros,
remedos de una forma todavía posible.
He aquí un inventario de placebos:
mi pequeña colección de distracciones.
LA MUJER OMNÍMODA
Soy la mujer omnímoda el ojo del desastre
la que crea la noche porque su párpado cerrado
la que sutura el tiempo y lo desgarra.
Devenida longeva y eternamente joven
así concebía yo el paso de los años/ casi
como un collar que va sumando vueltas
como si fuera el tiempo no más que una distancia.
No calculé empero, algunos desvaríos que el tiempo
trae aparejados. Y advierto ahora
que acallé sus voces ignoré sus presagios
los reduje a episodios.
Habría bastado con decretar la inexistencia de las cosas.
Cerrar los ojos. Ejecutar la noche.
(Fuente: Tema: Poesía)
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