Soneto estadounidense para mi asesino del pasado y del futuro
Siete de las diez cosas que me encantan de la cara de James Baldwin tienen que ver con la electricidad espiritual de sus expresiones. El zigzag entre la ceja izquierda & la derecha, por ejemplo. El pliegue entre los ojos como un diapasón o un surco, como un río que se ramifica en tributarios como renglones de frases eufóricas en busca de un punto. El hoyuelo en el mentón se estrecha y se expande como una pupila. Lo que más me gusta de todo son sus ojos. Y esas arrugas del color & la textura de la madera que arrastra la corriente hasta el barro alrededor de esos ojos. El barro está hecho de sencilla lluvia & tierra, de las mismas colinas & charcos bautismales de los que está hecho James Baldwin.
Traducción de Ezequiel Zaidenwerg
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