Uno debiera usar
más seguido Dios,
el vocablo Dios,
Dios, como Rilke
usó luz, o Hernández
usó caballo. Mi
abuelo leyó a
Hernández, lo sé
porque lo he visto
montarse en una siesta
a Dios y fue como
un cuchillo
plateado y largo
de cara al sol, y sus
rabiosas luces se extendían
a toda sangre, por mi
sangre también
No hay comentarios:
Publicar un comentario