EN UNA TERNURA DE AIRE
En una ternura de aire
se daba así, desde siempre, toda la música
y a qué esta lluvia?
y comenzó como en la sangre
un brillo y un tras brillo
dándose así de preciso sentimiento?
decía yo, acaso,
entre los ojos y la flor
la mirada y el árbol
a qué cantar este tiempo?
dónde es que se brinda
esta inclinación
de la lengua y el alma?
entre el reposo del rocío en la yerba
en la caricia suave del alba a la noche
en la presencia de la muerte y el amor?
Se brindara entonces
una atracción de luces
en el transcurrir de los días
todo me llegaba así
de músicas y sombras
decir vino después… después
decir es una acumulación
una gracia vertida en el tiempo.
Nos ocupamos de los cantos
porque hace a nuestra vida
la palabra informa el gesto
inclina la música necesaria a decir.
¿Fue primero
todo este asombro, digo,
fue ante todo y después de todo, también,
música? ¿Es así?
He derramado mi corazón, hermanos míos,
otra cosa no supe…
aquí estos cantos de aire… de aire.
.....
(Fuente: Daniel Freidemberg)
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