domingo, 9 de marzo de 2025

Corina Oproae (Transilvania, Rumania, 1973 / Reside en Cataluña)

 

 

ESPERA

 

Queman las horas.
 
Rígidas como cirios de boda.
Velos de cera incandescente
deshacen sus contornos.
El tiempo es un río templado
que engendra recuerdos aún por nacer,
donde los sueños se petrifican
como estatuas inertes con miradas de fuego.
 
Queman las horas.
 
En el pedestal del deseo,
el alma se recrea en el cuerpo
 
 
 

 

BACANAL

 

Era otoño.
Te estaba esperando
ahí donde el tiempo
se vuelve materia.
Llegaste puntual,
como las palabras de un buen amigo.
Nos miramos y conversamos
sobre el camino de las palabras.
 
Mientras tanto
las hojas seguían su proceso
de descomposición.
A ti sin embargo
te embriagaba el olor a hojas secas.
 
Fue cuando
sentimos la muerte
disfrazada de pájaro, o de atardecer.
Nos preguntó:
«¿Qué habéis venido a hacer aquí,
ahora, cuando acaba el otoño?»
Me soltaste la mano
y le contestaste
que celebrábamos solitarios
el banquete de las horas inofensivas,
aduciendo ofrendas
—metáforas vaciadas de sangre,
murmullos oxidados
atrapados en su viaje
hacia otra existencia.
 
 
 
 

CAMINO INVERSO

 

Tú eras la a,
yo era la b,
él era la c,
ella era la d…
Todos éramos letras
y aún no sabíamos
ser palabras.
Lo aprendimos poco a poco,
a través de infinitas combinaciones.
Ahora, somos palabras,
somos frases y textos
y ansiamos ser letras
para volver a aprender
cómo el amor todo lo que toca
lo vuelve palabra,
cómo nuestros cuerpos,
conscientes de sí mismos,
se destejen bajo sus manos
cuando saben
que nada más vale volver.
 
 
 
 

AQUEL AMOR

 

Fuiste tú quien lo ahogó
tan solo con palabras,
como si taparas su rostro candente
con una almohada gélida.
A conciencia, deliberadamente,
vibrando bajo el aleteo
de su última exhalación.
Lo confiesas
aunque podrías callarlo,
y lo haces porque sabes
que murió una muerte genérica
como un bajo continuo
que ahora te armoniza la vida,
pero te preguntas si de verdad
muere el amor
cuando le muere el nombre
ahogado debajo de palabras
o simplemente florece
dentro de otro nombre
a la espera de que un día
vuelvas a ahogarlo.
A conciencia, deliberadamente,
sabiendo que el círculo
es infinito.
 
 
 
 

HOY

Arrodillada
bajo el manto diáfano
del silencio,
succiono metáforas.
En mi garganta,
el universo es savia
con sabor a flores secas.
La guardo en una pila bautismal
llena de letras líquidas
y hacemos el amor,
mientras pido perdón
por las palabras que mueren
en vísperas de revelar verdaderos significados,
por las frases que la mente maravillada
construye
y luego olvida,
por tantas vocales tristes
que no encuentran el grito adecuado.
Cierro los ojos
para seguir bebiendo a sorbos
las confesiones de este silencio orgásmico
que nace de la cópula
de estrellas fulgurantes y palabras atávicas.
Contemplo mi cuerpo menguante.
Olvido el dolor y la ira.
Olvido el rencor y la envidia.
Olvido la rabia y la vergüenza.
Olvido el mal.
Mis dedos sagrados
palpan rayos de luz.
Mis ojos tan sólo reconocen verdades.
Nuestro amor se salva
en la saliva de este beso cósmico,
voraz y expectante.
Canto.
Soy lo que queda
después de mecerse el sonido
sobre el manto diáfano
del silencio.
 
**********
Fuente: Vuela Palabra - Revista de Literatura y Arte


(Fuente: Oscar Vicente Conde)

 

Avrom (Abraham) Sútzkever (סוצקבר אברהם, Smarhon, Bielorrusia, 1913-Tel Aviv, Israel, 2010)

 Puede ser una imagen de 1 persona

 

 

EJECUCIÓN (Ghetto de Vilna, 1942)

 

Cavo una fosa como se debe y ordenan
y busco consuelo en la tierra entretanto. 
 
Un golpe de azada y aparece debajo
Debatiéndose, patético, un pequeño gusano. 
 
Mi azada lo corta y sobreviene un milagro:
El gusano partido se hace dos, se hace cuatro. 
 
Otro corte de nuevo y ya son cinco gusanos;
¿Y todos estos seres creados por mi mano? 
 
Vuelve el sol y entonces mi ánimo sombrío
Y la esperanza fortalece mi brazo: 
 
Si un gusanito no se rinde a la azada,
¿Es que eres, acaso, menos que un gusano? 
 
 
 
___________________________
en “Poesía”, Pardés, Buenos Aires, 1983. Trad. del yíddish, Eliahu Toker. Véase también, del propio Toker, "El resplandor de la palabra judía", Arte y Papel, Buenos Aires, 1996. En la imagen, Avrom (Abraham) Sútzkever (סוצקבר אברהם, Smarhon, Bielorrusia, 1913-Tel Aviv, Israel, 2010 / Yivo Society).
Nota brevísima: Sútzkever y su esposa, Freydlke, fueron trasladados por los nazis (que asesinarían al hijo recién nacido de ambos y a la madre de él, Rayne) al ghetto de Vilna en 1941. En 1943, poco antes de la liquidación del ghetto, consiguieron huir y se unieron a la resistencia partisana. En 1946 Sútzkever testificó en los juicios de Núremberg, donde declaró contra Franz Murer, asesino de su madre y de su hijo. Luego de breves estancias en Polonia y Francia, la familia decidió trasladarse a Israel.
 
 
(Fuente: Jonio González)

 

Wadih Saadeh (وديع سعادة, Shabtin, Líbano, 1948)

 

Puede ser una imagen en blanco y negro de 1 persona

 

 

LOS NOMBRES DE LOS MUERTOS

 

Abrió la mano y contó con los dedos
Los nombres de los muertos,
Luego usó los dedos de la otra mano.
Añadió a la lista los colores que le rodeaban,
Las ramas del árbol que estaba frente a su casa,
Las plantas del camino y las hojas del bosque.
Y antes de dormirse,
Añadió su propio nombre.
 
 
 
________________________
en "Tal vez a causa de una nube y otros poemas", El Perro Malo, Madrid, 2018. Trad. de María Luisa Prieto y Ahnad Yamani. En la imagen, Wadih Saadeh (وديع سعادة, Shabtin, Líbano, 1948 / Al Jazeera)
 


(Fuente: Jonio González)

Sandra "Tana" Pasquini (Rosario, 1969)

 Puede ser una imagen en blanco y negro de 1 persona y sonriendo

 
 
 
¿Te preguntaste acaso Claudia, por dónde el dolor nos entra al 
cuerpo?
digo/ si te lo preguntaste quizá alguna vez antes del cáncer o 
durante
mientras las alucinaciones de la Morfina te llevaban de un punto 
fijo a cualquier parte
cuando la lengua te bailaba dormida entre la boca y la habitación 
se llenaba de alimañas innombrables
cuando tampoco el venenito amargo te calmaba el hueso y su 
hambre por tu pobre vértebra extenuada
¿te preguntaste entonces acaso por dónde el dolor nos entra al 
cuerpo?
porque a mí el dolor por tu cuerpo me entró temprano
furioso y desbocado por el pecho como un dardo prendido fuego
y desde ahí arrasó sin ninguna piedad como un golpe de mangual 
sobre los campos la casa los nombres y todas las mañanas
ahora yo camino con tus pies
me arrastro con su peso buscando lugar entre mi cuerpo
día y noche ando a tientas con el animal oscuro avanzando por mi 
sangre
lo escucho gruñir y acomodarse
cuando el hambre lo apremia roe un poco el hueso y entonces el 
cuarto vuelve a llenarse con los insectos de tu sueño
un río de cobalto anda brotando enloquecido de mis venas
de tanto en tanto cuando desboca amenazante
la pequeña bestia amaina conmovida
entonces yo pobre ignorante con la lengua ardida
como vos me doy de beber licor de adormidera
y no hago otra cosa que recordar y preguntarte
¿por dónde el dolor nos entra al cuerpo?
 
 
(Fuente: Tema: Poesía)

Wei Feng (China)

 

«Enviada al académico Ch’en del Instituto para la Iluminación de la Literatura»

Versión de Juan Carlos Villavicencio




 
 
Profundo en el otoño
más allá de las tierras salvajes,
esta extraña trepa a una terraza
frente al palacio.

Mi carta de larga distancia
no estaba sellada ni enviada todavía
cuando, por las alas de los gansos salvajes,
llegó una de tu parte.
La tierra helada atrofia
los árboles fronterizos; los cielos puros
rompen las nubes enfermizas.

A una distancia ilimitada
tu corazón me vigila; a gusto
en el Palacio del Sur, tu carta
es brillante como un tejido de seda.



Pintura original: Paisaje, de Shitao (c.1698–1700)


(Fuente: Descontexto)

 

Natalia Litvinova (Gómel, Bielorrusia, 1986 / Vive en Argentina)

 

 

 

SIBERIANA

 

Miro hacia delante y soy igual al paisaje
en el que nací, allá donde las mujeres son felices
lavando ropa en el río, la escarcha arrasada
por la corriente les raspa la piel.
Yo llevo la sangre de las mujeres
que vuelven a casa enrojecidas
como si ocultaran un amor.
 
 
(Fuente: Daniel Rafalovich)

Fernando Pessoa (Lisboa, 1888-1935)

 

De" Poemas inconjuntos" 

 


 
 
 
No basta con abrir la ventana...
 

No basta con abrir la ventana
Para ver los campos y el río.
No es bastante no ser ciego
Para ver los árboles y las flores.
Es también preciso no tener ninguna filosofía.
Con filosofía no hay árboles: hay apenas ideas.
Hay solo cada uno de nosotros, como un sótano.
Hay solo una ventana cerrada, y todo el mundo de allá afuera;
Y un sueño de lo que se podría ver si la ventana se abriera,
Que nunca es lo que se ve cuando se abre la ventana.

En Alberto Caeiro, "Poemas Inconjuntos”. Athena, nº 5, Lisboa: Febrero de 1925. Arquivo Pessoa
Versión de Isaías Garde, Biblioteca Ignoria

 
 

Não Basta

Não basta abrir a janela
Para ver os campos e o rio.
Não é bastante não ser cego
Para ver as árvores e as flores.
É preciso também não ter filosofia nenhuma.
Com filosofia não há árvores: há ideias apenas.
Há só cada um de nós, como uma cave.
Há só uma janela fechada, e todo o mundo lá fora;
E um sonho do que se poderia ver se a janela se abrisse,
Que nunca é o que se vê quando se abre a janela.

Fernando Pessoa,"Poemas Inconjuntos”. Poemas de Alberto Caeiro, (Nota explicativa y notas de João Gaspar Simões e Luiz de Montalvor.), Ática, Lisboa, 1946 (10ª edición: 1993).
---
Foto: Fernando Pessoa A Brasileira do Chiado
 
(Fuente: Otra Iglesia Es Imposible)

 

Raymond Carver (Clatskanie, 1938-Port Angeles, 1988)


 

Fragmento tardío

 

¿Y conseguiste lo que
querías de la vida?
Sí.
¿Y qué querías?
Poder decir que me quisieron,
sentir que fui querido en este mundo.
 
 
 
Traducción de Ezequiel Zaidenwerg Dib 

 

sábado, 8 de marzo de 2025

Eduardo Milán (Uruguay, 1952)

 

 

ESTOY HABLANDO. UNA MEDITACIÓN POÉTICA

 

Cuando todo ha desaparecido en la noche, «todo ha desaparecido» 
aparece. La noche es aparición del «todo ha desaparecido». Esto con 
la contundencia de lo escrito a mano, con marca de labor y con la 
extrema certeza de quien ve lo que dice por un telescopio, con la visión 
de lo que dice como de algo que va pasando, fluye. Esto tiene una 
eternidad encerrada entre comillas y punto. Rastros ininteligibles sobre 
la arena. Huellas de patitas de mosca. Tiene silencio, no de palabra: de 
aquel dentro del cual todo duerme, todo abarcando como una carpa la 
entera disposición de los seres. Esto merece más que una primera vista, 
un vistazo de amor. Merece una ininteligibilidad, dos, tres. Merece que 
no se entienda y sobre ese no entendimiento de escritura se funde un 
pueblo feliz de nombre Feliz.
.....

 (Fuente: Daniel Freidemberg)

Héctor Giuliano (Piamonte, Italia, 1947)

 

VEJEZ

 

Ahora,
que vienen por mí
los cirujanos,
los neurólogos,
los mediocampistas
de la próstata
y el zumbido.
 
Ahora,
nutrido de dudas,
derrotas,
gimnasias al cuete,
agüita
y pastilla,
me pongo de espaldas,
retraigo los alerones,
expío mojigangas
para quien me espía,
caigo de boca
en las uñas
de mis fantasmas
y la ventana cruje,
doliente,
enardecida,
sin cortinas ni burletes. 
 

- Inédito -

 

Sonja Sekula (Lucerna, Suiza, 1918-Zúrich, Suiza, 1963)

 Puede ser una ilustración de 1 persona y texto

 

 

VIENTRE

 

Estoy bajo la lluvia, negro sobre blanco,
estoy en medio de la noche con manos extrañas
nado en el calor en el miedo húmedo
al día y el odio, cierro mis oídos...
y el paso el paso de la piedra que
cae en el espacio en el corazón y
el hombre en la luna diciendo adiós con la mano
a la barca que va hacia donde la boca
se enrojece con una breve palabra que parte
donde el vientre permanece quieto sin necesidad
de hablar.
 
 
_____________
en "Surrealist Women: An International Anthology", The Athlone Press, Londres, 1998, ed. y trad. del original en inglés, Penelope Rosemont. Versión de Jonio González. En la imagen, Sonja Sekula (Lucerna, Suiza, 1918-Zúrich, Suiza, 1963 / Gallerie Hilt Basel) y uno de sus cuadros, "Open Door", 1949-1951.
 
 

WOMB

 

I am in the rain, with black writing,
I am in the night with strange hands
I swim in the heat in the humid fear
of day and hate, I close my ear. . . .
and the step the step of the stone that
falls is the space in the heart and
the man in the moon waving good-bye to
the boat that goes where the mouth
is red with a little word that parts
where the womb stands still beyond
speaking.
 
 
(Fuente: Jonio González)

Jorge Aulicino (Buenos Aires, 1949)

 

1848

(o Un filósofo en el mundo del satori)

 

Marx navegaba por el mar de las ideologías
y comprendió de pronto que
ideología quiere decir mentira
-y dejen de joder con "visión del mundo", profirió
en perfecto alemán
-es decir dijo Weltanschauung.
Su visión del mundo se ensanchó y vio la orilla lejana.
Pero se tardaría mucho en comprender que al desembarcar
se mojó los zapatos y las botamangas.
 
 
 "Revolución, divino tesoro", inédito

Mónica Córdoba (Necochea, Buenos Aires, 1962)

 

¿CUÁNDO?

 
En un principio
se juntaron "ellos"
a pensar el mundo:
Tristes competencias,
escalas de poder,
guerras, posesiones, esclavitud ...
(Tal vez estoy ahí)
Oscura noche.
 
Se encontraron "ellas"
insumisas, desgarradas,
madres, negras, pobres, indias ...
a pensar el mundo:
abrir nuevas puertas e inéditos silencios.
(Estoy ahí)
Aclara la noche.
 
¿Cuándo nos reunimos
a pensar el mundo
con todo lo verde, las rocas, el agua,
las vacas, los pájaros ...?
(Quiero estar ahí)
¿Y si amanece?

Daniel Quintero (Buenos Aires, 1957)

 

Mitológica

 

La mujer no nació de una costilla,
ni del olvido, ni de una luz en ausencia.
La mujer fue la originalidad de la tierra,
esa obra anticipada al tiempo,
creación triangular de su propia certidumbre,
ella formó de su útero inconmensurable
la fantástica circunferencia de todos los verbos por venir.
 
Fue cadencia de sus harinas expuestas,
caos de pan que en definitiva comenzó con el mundo;
la mujer no,
la mujer no nació de una costilla,
nunca fue diosa del olvido,
despertó un día y resultó pulcramente angelical
con diagnóstico de debilidad,
pero la mujer no
no fue débil hueso de nadie,
fue el pacto que le dio al universo naturaleza de creación,
forma lúdica, manía jerarquizada de su angustia azul,
azar su caricia de pez entra las arenas.
La mujer no,
la mujer no fue hueso ni nada,
fue el anticipo de la raza
toda ella en dos que se hizo hombre
por propia ternura y sacrificio.
 
La mujer no nació de una costilla,
sufrió la trampa de Constantino
manipulando mitos para seducir fieles a su imperio
con el sólo propósito de recaudar impuestos,
tan impuesto
que hasta María fue virgen.
 
 

de MALHOJA 2015

 

Enrique Hernández-D’Jesús (Mérida, Venezuela, 1947)

 Puede ser una imagen de 1 persona y barba

 

MARIPOSA SIN TIEMPO

 

Lluvia de pájaros, lluvia de sueños, lluvia de ternura. La lluvia es 
una función de la vida que acontece y acompaña las tardes, las 
mañanas y las noches del amor venerado en la llovizna. Hay 
diversas maneras de amarse en las lluvias, hay lluvias para los 
amados, hay lluvia para agarrar un pequeño resfriado y cobijarse 
en los brazos del sol. Hay lluvias que hacen desaparecer las formas 
mágicas y crean las formas útiles para lavar los ojos, son las lluvias 
de las lágrimas, las lluvias del arrebato, del desencanto, las lluvias 
de las piedras sagradas y las amapolas milagrosas. Las lluvias que 
cuidan y protegen las plantas, las lluvias que cubren los nidos de los 
pájaros. Lluvias temperamentales y alborotadoras de sentimientos, 
lluviosa de estrellas, lluvia dorada, lluvia de helado, lluvia de canela, 
lluvia de sueños. La mudanza de la lluvia, el sonido de la lluvia de 
paso, la melodía y vegetales de la lluvia que seguirá en la espera 
infinita de los lluviosos
 
 

 

(Fuente: Enrique Hernández-D’Jesús)

Julia Ferrer (Seudónimo de Julia del Solar Bardelli: Lima, 25 febrero 1925–Lima, 16 febrero 1995)

 


.
La garza de espuma
de encaje de luna
inmovil vigila
 
los duendes
las hadas y brujas
los sueños lascivos
de la laguna
 
con su ojo de nácar
el ángel maligno
 
contempla
la garza de espuma
de cuello infinito
de ojo de nácar
contempla la diosa
dormir
la laguna
 
la nombra en silencio
la siente venir de su sueño
la acecha
la hiere
la tiñe de sangre
 
la ama
la siente
la ve con su ojo de nácar
 
la besa
 
se vuelve a dormir la laguna
de encaje de luna
inmovil vigila
la garza de espuma
 
 
 
Imágenes porque sí (1958)
En: Poesía
Selección de Sarina Helgott
Lima: Editorial Tierra Nueva, 1959, pp. 22-23
 


(Fuente: Óscar Limache - Word Poetry movement)

Luis Franco González (Ecuador, 1988)

 

"Dos | Antífonas para retocar El Mito de Sísifo y no herir a T. W. Adorno"

 


 
 
 
 
Antífona 1: la irreductibilidad de este mundo a un principio racional y razonable

no se trata de enfrentarse a la envidia que el ser reviste en su única morada
o la novela que ha dejado inconclusa porque su padre guardó el traje de novia
con el que su madre se pegó dos tiros luego de una raya blanca previa al amanecer
no se trata de decir aquí dejo el universo
y regresar a la orilla del neobarroco a beber agua sucia
no se trata de sepultar la otra ternura con las manos aruñadas por el lenguaje
se trata de carcomer cada fibra del látigo que nos asegura la restauración

es sólo un sueño del que jamás despertaremos con sed y hambre
aquí no hay una mentira ni una palpitación que diga que fuimos o somos
aquí no se obvia el ritmo como una explicación astrofísica u ontológica

esto es un himno que se va destruyendo / que se desmorona / que se enfrenta al destino
con la única cara
la de la locura + la de la distancia + la del silencio que tengo en esta esquina
el resto de la poesía es una judería donde fornican con el prepucio de la palabra
cárcel
un nacimiento ensangrentado bajo el propio nombre del poeta
es la humanidad y su fracaso que abren nuestros ojos
para nutrir la idea absolutista de la dictadura

así que baja la cabeza y recuerda que la soledad es una e invencible, poeta
el alivio es una ramera que los débiles guardan en sus bolsillos

dibújate otro cuarto para convencerte que te has vencido
                                                                       duerme como si nadie
                                                                       en este mundo te esperara

y remolca la piedra, otra vez.

Antífona 2: no se trata de un grito de liberación y de alegría, sino de una  comprobación amarga

una metáfora más y nos acostamos
una metáfora para contradecir lo que calienta esta pequeña línea
un golpe oblicuo que estalla en las alas polícromas de esa torpeza
la debilidad que tengo cuando estoy frente al computador
y no resisto desparramarme como un territorio sin dientes
pero el terreno no está dentro de ti
él no va dentro de ti
tu nación es la jaula donde el sol se acuesta con las piernas hinchadas
tu patria es el adjetivo que advierte cómo puede otro gorrión cautivar la tristeza

otra metáfora y nos acostamos
puede ser que digamos que mañana volveremos menos sucios
puede ser que no
diles algo que quieran oír para que no reclamen a los muertos
su pobre huella centinela que es un animal caído
diles algo que quieran oír
puede ser que no
espero que incluso la piel se extienda como un gusano absorbido por la planta de tu pie
espero encontrar el desahogo del acto final
la tragedia – por ejemplo – la tragedia
pero para todo hay tiempo
                                    [mojado y abierto]

dicen que detrás de la sonrisa también se puede negar a los hijos
en mi sangre no desfila la consumación del loto
| ¿a dónde? | ¿quiénes? | ¿cuántos? | ¿cómo? | ¿hombre o mujer? | ¿niño o anciano? |
+ + + ¿douglaselmarnoexiste?
esto se desnuda como una vulva encharcada de estrellas postradas en mi cenicero
esto es otra vez volver y no quiero
puede ser que no
volver a remover las entrañas y querer estancarse en la vida
reclamar el sacrificio que la mujer olvida cada día en el panteón
mientras Jacinto peina los cabellos del arpa
y riega su sangre como un insecto atrapado en orquídeas
signos a los que no tenemos a quién dedicar
puede ser | puede.

Antífona 3: la diferencia consiste en que no haya guion, sino una ilustración sucesiva e inconsecuente

en otra latitud alguien escribirá otro canto
quemar detrás del relámpago un quejido que retroceda para buscar su lugar en el policosmosexual
¿dónde quedaron los pasos que nos buscaban?
despedirse ante la cabeza caída o el mar que no existe
y no oír la luz cuando abre tu jaula / la jaula de los pájaros ciegos
convencerse que el secreto no es otra ventana que se agrieta
sino creer en las imágenes que la lluvia estampa en el linaje de los peces

estremecerse ante el dolor de la carne que ya no es un engaño
y ahora medir la profundidad de la respiración que lame el otro labio de esta ciudad
para ya no cantar y sólo puedas ver su cabellera recogida en el insomnio más fiero

entre el agua y su obstinación de abrir el vientre para encontrar el estío
madre
¿dónde quedó el gemido que la oruga traspasó en la habitación
como un halo atrapado en el tiempo que vertió el duelo de tu hermano?
¿y las azucenas que el extraño veló sobre tu pecho como un silbido?

aquí yace esta mano que parte hacia la frontera de tu miedo

en otra latitud alguien dirá que el destierro no es perderse
sino que agotará la última palabra para esta juventud
para callar ante el lengua de ojos abiertos
para convencerse de su propósito en el mundo
de ingresar al útero tan pobres como vinimos
descalzo
siempre.

Antífona 4: no hay destino que no se venza con el desprecio

la arquitectura de la oscuridad se entiende
cuando tenemos los puertos en la punta de la lengua
en la delicadeza del silencio podrá encarnarse el último botón en los huesos
de este mamífero que arde en fiebre y oculta su cabeza

una mano con ansiedad que se arriesgue ante el cigarro
una mano para la abstracción del viento que huye de lo concebido

[mojado y abierto]

no hay destino
puede ser que no

quédate aquí
con la madera y los libros
para que sientas la añoranza de los conceptos
donde la desgracia peina la melena de los árboles de pehuén
mientras nos despedimos

puede ser que no | puede ser.
 
 

Luis Franco González, incluido en Liberoamérica (29 de mayo de 2021, selec. de Juan Suárez Proaño).
 
 
(Fuente: Asamblea de palabras)

 

Héctor Giuliano (Piamonte, Italia, 1947 / Reside en San Juan, Argentina)

 

La diligente realidad,
la prolija.
 
La del nacimiento,
si es que lo hay,
la del espíritu
la del macizo muro,
la del ADN y los ectoplasmas.
 
La realidad
de órganos expuestos,
la del páncreas,
la de nada de eso.
 
La curtida,
luminosa,
idolatrada escorpiona,
la del dolor invisible
y la risa que vacila. 
 
La realidad irrefragable,
la los drones y los hadrones,
turbia,
avergonzada,
de espaldas,
la cautelosa.
 
La realidad
como desprendimiento
de retina de los dioses
y los monos,
la de las atrocidades,
la dulce, consentida,
la de aquellos paraísos
artificiosos,
burda,
amañada,
bombástica,
humilde.
 
La realidad
que está y no está,
la que queremos y no vemos,
y al revés,
la que no es ni será,
la que arranca los dientes,
la boba,
ideada y servil,
la sublevada
del espejo y la gruta,
la de los números
y símbolos,
la bruta realidad,
mendaz,
aguachirle,
esta realidad
perspicua,
indoblegable creo,
la virgen y la puta,
la no mancillada
por cualificadores
y soldados medievales.
 
La realidad
que se envanece
y desvanece
cuando termino
de escribir alguna palabra,
la misteriosa permanente,
la expectante,
la que se moldea
a medida que pensamos
o actuamos,
la vencedora de sí misma,
ajo, vino, basalto,
alquitrán,
la realidad
esclava
de la deformidad
de la expresión y el tacto,
la realidad
que no es real
que es y no es
y es lo mismo,
o algo que se meta ahí,
la paralela,
la isósceles,
la de los dados
estremecidos,
la de la inventada vida
y muerte.
 

- Inédito -

 

Paul Celan (Rumania, 1920 - Francia, 1970)

Paul Celan - La música hendida del pensamiento

 

MANDORLA  

 

En la almendra — ¿qué hay en la almendra?
    La Nada.
    La Nada está en la almendra.
    Allí está, está.
 
    En la Nada — ¿quién está? El Rey.
    Allí está el Rey, el Rey.
    Allí está, está.
 
    Bucle de judío, no llegarás al gris.
 
Y tu ojo — ¿dónde está tu ojo?
    Tu ojo está frente a la almendra.
    Tu ojo frente a la Nada está.
    Apoya al Rey.
    Así está allí, está.
 
Bucle de hombre, no llegarás al gris.
Vacía almendra, azul real.
 
 
 
Traducción de José Ángel Valente
 
 
(Fuente: León Félix Batista)