sábado, 1 de febrero de 2025

Joaquín O. Giannuzzi (Buenos Aires, Argentina, 1924-Campo Quijano, Salta, Argentina, 2004)

 

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LA INGRID BERGMAN

 

Mi proyecto erótico de los 18 años.
Una vez le hice señas desde la oscuridad
y ella se desprendió de los brazos de Gary Grant.
Se despegó de la pantalla,
vino hacia mi butaca, se sentó en mis rodillas
y no se levantó hasta que mis pantalones se humedecieron
                     y the end.
Qué poesía amarga la de mi vida en esa época.
Ahora debe andar por los sesenta y tantos
y yo fumo veinte cigarrillos por día para no sentirme
                     excesivamente dramático.
 
 
 
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en "Señales de una causa personal", Cuarto Poder, Buenos Aires, 1977. En la imagen, Ingrid Bergman por Laszlo Willinger, 1939. Joaquín O. Giannuzzi (Buenos Aires, Argentina, 1924-Campo Quijano, Salta, Argentina, 2004)

 

(Fuente: Jonio González)

Jorge Eduardo Eielson (Lima, Perú, 1924-Milán, Italia, 2006)

 

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CUERPO MULTIPLICADO

 

No tengo límites
Mi piel es una puerta abierta
Y mi cerebro una casa vacía
La punta de mis dedos toca fácilmente
El firmamento y el piso de madera
No tengo pies ni cabeza
Mis brazos y mis piernas
Son los brazos y las piernas
De un animal que estornuda
Y que no tiene límites
Si gozo somos todos que gozamos
Aunque no todos gocen
Si lloro somos todos que lloramos
Aunque no todos lloren
Si me siento en una silla
Son millares que se sientan
En su silla
Y si fumo un cigarrillo
El humo llega a las estrellas
La misma película en colores
En la misma sala oscura
Me reúne y me separa de todos
Soy uno solo como todos y como todos
Soy uno sólo
 
 
____________________________
en "Noche oscura del cuerpo", Jaime Campodónico Editor, Lima, 1989. En la imagen, Jorge Eduardo Eielson (Lima, Perú, 1924-Milán, Italia, 2006 / Casa de la Literatura Peruana)
 
 
(Fuente: Jonio González)

 

Emily Elizabeth Dickinson (Amherst, Massachusetts, 1830 - 1886)

 

El cerebro es más amplio que el cielo 

 

























632

El cerebro - es más amplio que el cielo -
colócalos juntos-
contendrá uno al otro
holgadamente - y tú - también
el cerebro es más hondo que el mar -
retenlos -  azul contra azul -
absorberá el uno al otro -
como la esponja - al balde -
el cerebro es el mismo peso de Dios -
pésalos libra por libra -
se diferenciarán - si se pueden diferenciar -
como la sílaba del sonido -

c. 1862

En Poemas, selección y traducción de Silvina Ocampo, Tusquets Editores, Buenos Aires, 2011



[632]

The Brain - is wider than the Sky -
For - put them side by side -
The one the other will contain
With ease - and You - beside

The Brain is deeper than the sea -
For - hold them - Blue to Blue -
The one the other will absorb -
As Sponges - Buckets - do -

The Brain is just the weight of God -
For - Heft them - Pound for Pound -
And they will differ - if they do -
As Syllable from Sound -

c. 1862

Transcripción basada en la edición Thomas H. Johnson de The Complete Poems of Emily Dickinson, Harvard, 1955
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Ilustración: El triunfo de Baco (detalle: cabeza de Dioniso), siglo XVII, José de Ribera, el Españoleto
 
 
(Fuente: Campo de maniobras)

 

Erich Fried (Viena, Austria, 1921-Baden Baden, Alemania, 1988)

 

 

CONVERSACIÓN CON UN SUPERVIVIENTE

 

¿Qué hiciste por aquel entonces
que no hubieras debido hacer?
“Nada“
¿Y qué no hiciste
que hubieras debido hacer?
“Esto y aquello
tal cosa y tal otra:
algunas cosas”.
¿Por qué no lo hiciste?
“Porque tenía miedo”
¿Por qué tenías miedo?
“Porque no quería morir”
¿Murieron otros,
porque tú no querías morir?
“Creo que sí”
¿Tienes algo más que decir
sobre lo que no hiciste?
“Sí: preguntarte
qué hubieras hecho tú en mi lugar”
No lo sé
y no puedo juzgarte.
Sólo sé una cosa:
mañana ninguno de nosotros
seguirá con vida
si hoy volvemos
a no hacer nada.
.....

traducción de Jorge Riechmann
(gracias, Jonio González)
 
(Fuente: Daniel Freidemberg)

 

Hilda Hilst (Brasil, 1930 - 2004)

 


 

 

Que te devuelvan el alma

 

Homenaje a Pavel Kohout   Que te devuelvan el alma Hombre de nuestro tiempo. Pedíselo a Dios O a las cosas en que creés La tierra, el agua, la noche Desmedida, Gritale si querés, A tu propia panza Si es ella la que manda En tu vida, no importa Pedile a la mujer La que fue novia Y se hizo amiga Abrí la boca, aullá Pedile a la lluvia Rugí Como si tuvieras en el pecho Una enorme herida Abrí grande la boca Chillá: EL ALMA: EL ALMA DE VUELTA. 

 

Traducción de Ezequiel Zaidenwerg Dib

Verónica Zondek (Santiago de Chile, 1953)

 

"Instalaciones de la memoria" 

 

 

 

 

Una ventana se construye para mirar a otra.

¿Cuántos rostros en domingo espiaban otro rostro?
¿Qué pared deshojada te pertenecía?
¿En cuál cama gritaste de placer?
¿En cuál te retorciste impotente?



Ninguna carne en ninguna parte.
Ninguna ave.
Ninguna flor.
Ninguna huella de zapato.
Ninguna pata de equino.
Ninguna rueda del mentado progreso.
Ruinas.
Ex-edificios.
Ex… 
Desplome por doquier.


El tiempo devuelve los muros al polvo


El marco de esa ventana es una boca sin palabras.



Ventanas para mirar lo que…
y ventanas para observar al caminante.
Ventanas para mirar la vida al derecho y al revés.


Y nadie.
Sólo el resto viviente de una mano que fue.




Silencios.
Silencios poblados con almas en pena. 
Silencios sin lenguas al aire.




Murmullos.
Murmullos que trepan los muros.
Y ver
 ver cómo brotan
 en qué ventana
 en qué ojo el testimonio
 ver
 ver cómo es que detienen el habla dicotómica
 cómo golpean las puertas
entran a las habitaciones
ponen la mesa
compran el pan
y con qué cupones
y con qué cara
si los tiempos pasan volando
y pasa la carne
y se abre la historia
para el aliento
para la hoja
 la sonrisa del olvido
 el algo
 la alguna cosa
 de Ud. Mr. Sr. Capataz.
Sí Sr.:
murmullos.


Hay un angelito enterrado más allá de los barrotes.



Silencio:
en ese patio y cara a cara
hablan de a dos.
Silencio:
hablan lo que el tiempo enmudeció.



Busco luz en la oscuridad azabache de un adentro.



Los dientes del animal relucen en la negrura de un hocico.



¿Qué responde el aire cuando la carne se desprende del hueso?



Era de hombres construir monumentos que tocaran el cielo.
Era de hombre intentar lo eterno y ganarle a los dioses.
Hoy el hombre construye para mamar sin sacio la tierra.
Es de hombres el fierro, el dinero y el nombre.
Es de hombres el poder por el poder.
Poder por poder por poder.
Por poder poder.


También en el desierto la verja comentó el rostro de la propiedad privada.



Un ojo talla la ventana con sus uñas en el tiempo que ocupa el deterioro.
La historia no está escrita. Los muros no hablan. La ventana es ciega.
El suelo no guarda huellas de animal. En frente

otros muros

otras vidas

otra amnesia.


Un dolor está embalsamado.

Un silencio graba su mano en el cuaderno alto y celeste.

Un ojo es un paso estancado en la arena del reloj.



¿Qué desaparece cuando un muro se descascara?

¿Cuál es el orificio que elegiremos para leer la historia?



¿Qué amor de hombre construyó la casa de la cruz?
¿Por qué mi querido dios?
¿Por qué haces que permanezca ese monumento que cobijó al hombre
y en cambio
derrotas al ser que lo construyó?
Aun así
dicen los que dicen
que tú dices
que sí
que lo amas igual que a ti mismo.


Un viento ara el paisaje.

Dos cordilleras guardan La Oficina.

Lo que sólo se construye para explotar un mineral muere de muerte súbita


Donde estuvo el hombre
hambre hubo.
Basura.
Luz y sombra.
Más basura.
¿Qué hubo?
Donde estuvo el hombre
hambre hubo.

Basura.
Luz y sombra.
Más basura.
¿Qué hubo?



¿Colgará aún
una palabra
de 
estos muros
devastados?
¿Serán esos fierros
la escritura que signa una historia?
¿Habrá una voz
un eco en la arena
un enterrado
que sonroje el rostro de los escombros?



Cuando se detiene el trabajo repta baboso un sigilo.



El hombre censura la carga del silencio y el vacío.



Cuando él se aleja encalla el tiempo
 y los cañones dejan de humear


Él habita la tierra arenosa y sin flores de este lecho terminal.




Una rueda.
Una rueda que rodó y que ya no rueda.



Un ojo despierto enfoca siluetas de hombres que ya no son.



Un no cristal que filtra el día.
Una chimenea. Dos chimeneas. Tres.
Ningún perro.
Un silencio de origen o término.




Otra vez una ventana que mira la calle.

Otra vez una ventana que encuentra otra ventana.

Sí, dos ventanas que miran la calle.


Fragmentos de un ayer.

Fragmentos de un otro.

Fragmentos de un hoy.

No hay nada ya que devuelva el rostro.

No espejismos
no vidrios
no cristales
no vanidad.

Un solo en el viento.
Un polvo de tiempo.
Un ojo.

Ya la muerte estuvo
y bailó con sus pies huesudos.

La luz se derrama sobre una calle alongada.


Polvo de entrada y polvo de salida.

Restos.

Resistencia en los bordes.

Lucha estática.

El día.
La noche.


La ausencia de palabras.
 
 

En "Instalaciones de la memoria", El esplendor de la granada. Poesía reunida (1984-2022)Libros del Cardo, Valparaíso 2023

---
Foto: La Raza Cómica s/d
 
 
(Fuente: Otra Iglesia Es Imposible)

 

Emily Dickinson (Amherst, EEUU, 1830-1886)

 

no es necesario ser un cuarto








 
 
 

670


No es necesario ser un cuarto - para estar embrujado -
ni una casa -
el cerebro tiene corredores - que superan
los lugares materiales -

vale más encontrar a la medianoche
un fantasma visible
que afrontar en el interior -
ese huésped más helado.

Vale más atravesar galopando una abadía
apedreado -
que encontrarse a sí mismo desarmado -
en un lugar solitario -

Ese uno mismo, detrás de uno mismo oculto -
debe sobrecogernos más -
el asesino escondido en nuestro apartamento
será un menor horror.

El cuerpo -busca un revólver -
pone cerrojo a la puerta -
presintiendo un fantasma superior -
o más -

c. 1863

***

Versión de Silvina Ocampo
Otra iglesia es imposible

/

[670]


One need not be a Chamber - to be Haunted -
One need not be a House -
The Brain has Corridors - surpassing
Material Place -

Far safer, of a Midnight Meeting
External Ghost
Than its interior Confronting -
That Cooler Host.

Far Safer, through an Abbey gallop,
The Stones a'chase -
Than Unarmed, one's a'self encounter -
In lonesome Place -

Ourself behind ourself, concealed -
Should startle most -
Assassin hid in our Apartment
Be Horror's least.

The Body - borrows a Revolver -
He bolts the Door -
O'erlooking a superior spectre -
Or More -

c. 1863

 

(Fuente: La comparecencia infinita)