de "estudios sobre el amor"
Yo estoy por el amor.
Y también por el sexo.
Desenfrenado, a ultranza,
pero siempre dulcísimo,
siempre con la idea de que la piel es sagrada
y sagrada es la voz, sagrados los ojos y la sonrisa.
Quisiera una humanidad locamente sentimental,
porque somos más hermosos
cuando comenzamos a rozarnos,
cuando el aburrimiento se quiebra
desde el terremoto de una pasión.
La alegría no es un éxito,
ni la llegada de una riqueza,
sino el milagro de conmoverse
por la cercanía
del reino de la soledad
que llamamos universo.
~
Esta noche en Módena la muerte me ha quitado
el último diente de mi carne.
Ahora puedo dar
el primer beso de mi vida
y puedo hacer cosas nunca he chas
cuando todavía tenía
un amor amigo de la muerte,
enemigo del amor.
~
Lorenzo y Graziella
Mandé cartas de amor
a los cielos, a los vientos, a los mares
a todas las extendidas
formas del universo.
Así escribe Lorenzo Calogero
y yo pienso en Graziella, la chica calabresa
de quien no sé nada, pienso
qué podía dar un ser de carne
a un hombre que se alimentaba de palabras y fantasmas
hay personas que solo saben conocer
los gusanos y los ángeles.
Habría sido bello si un día Graziella
hubiese ido al pueblo de Lorenzo
para besarle las manos,
pero los poetas solo saben amar cuando
el amor no está.
Lorenzo nunca se despegó
de sus miedos,
ella fue su primer y última aventura.
~
He perdido todo
incluso tu ausencia.
Se busca evitar
el fin de un amor,
pues el verdadero luto
es el fin del desamor.
~
Tengo un corazón que se ha vuelto
ojo,
cada vértebra es un ojo
de mi espalda.
Ahora estoy atentísimo
a cada sílaba que flota en el aire.
Celebro cada presencia.
La noche que está por venir
será más larga que un siglo.
Yo así amo al mundo:
de vez en cuando, con ondas
imprevistas, repentinas
tengo secretos, conmociones clamorosas
para los seres y las cosas
pero no resisto,
la mente pronto sola se hace,
el mundo me sube encima,
no hay un minuto gentil,
me pisa cada cosa
incluso mi respiración.
~
El amor por ti me ha alcanzado
y ahora está aquí dentro de mí
como una larga calle.
El amor más que sentimiento
es geografía.
~
Susan
Nunca se puede pedir a alguien
que modifique un sentimiento.
A escribir esto, una mujer
que no busca personas
sino mujeres y hombres,
una que mira a la realidad
y la raíz de la mirada es la cama,
escapar y volver a la cama,
una mirada que está siempre colgada
no a los asuntos del mundo
sino a aquellos del cuerpo rechazado
y encariñado, tomado y dejado:
la adyacencia sin remedio
del pensamiento y el deseo.
~
Paul e Ingeborg
Seis semanas de amor en Viena
y luego un largo perderse y encontrarse
sin compromiso, sin ficciones.
Hoy habría sido diverso,
hoy se es menos exigente,
se espera, se resiste
gracias a las historias paralelas,
a las traiciones.
Paul e Ingeborg
no podían estar juntos
porque no tenían
una historia de amor con la vida.
Él apagado en el río
con su oscuro ardor,
ella se durmió con un cigarro encendido
y se quemó en el sueño
tres años más tarde.
Morir a veces parece un accidente,
en verdad puede ser un objetivo.
~
Alda y Giorgio
Cuando se encuentran los grandes masticadores del ansiedad
el amor de inmediato se vuelve riña.
Así fue el encuentro entre Giorgio y Alda.
Giorgio escribió: El amor es un excelente combustible para
alimentar el malestar que puede conducir a la literatura. Es
importante, extremamente importante que el amor vaya mal.
Alda así hablaba de él:
él hablaba denso y enamorado
como una golondrina constelada,
lleno de semillas de adiós.
Era un lenguaje provenzal
con una cadencia andaluza
y con sus manos rozaba mis libros,
en vez del rostro, y decía:
"Qué extraño trigo
te crece en el pelo".
Imagino sus encuentros complicados
las manos sudadas de él, el corazón agitado
el miedo que cada relación sea un pozo.
Ella no tardó mucho en entenderlo:
No busquéis tomar a un poeta, porque os escaparán entre los dedos.
Giorgio se casó con la prosa, la mentira
de la que estaba enamorado.
Alda no estaba loca, solo convencida
que la razón es un lugar equivocado.
~
Henry y Anaïs
Su fuego no estaba en el cuerpo
sino en la escritura.
Y allí ella era más buena que él,
tenía una grande fineza
que tienen los orgasmos femeninos.
En los hombres está el fuego artificial
del esperma, pero en las mujeres
el orgasmo viene de lugares lejanos
de la tierra, es el milagro que junta
la desembocadura y el manantial.
Henry y Anaïs cuentan
que hubo un tiempo
en que se escribía cada día por amor
cada día en que se subía al cielo
y se bajaba a la tierra; que en los cuerpos
estaba el furor con el que Dios nos hizo,
el diluvio de los ruidos
aún no había vencido
al misterioso silencio del instinto.
~
Sobre la poesía como un apretón de manos
Pero yo soy una ardilla
una ola de mar.
Prefiero a las viejas del pueblo
el silencio de un metro de nieve
que a vuestros versos.
La poesía no es asunto
de los cultos, es eso que escapa
a la cultura,
la poesía viene de la luz
escondida en el polvo.
A veces un beso puede decir la vida
más que un poema entero,
el surco de la espalda es más elocuente
que el molesto zumbido
de la vuestra sabiduría.
Y después yo estoy aquí para encontrar hermanos
y hermanas antes que lectores,
estoy aquí para dislocar mis huesos,
no para tenerles en su puesto.
La vida me la he ganado
con la muerte
y tal vez es esto lo que me lleva
cerca del corazón de quien se ofrece.
La poesía insta a la vida sensual,
no es sino un apretón de manos
en medio de la agonía.
En Studi sull'amore. Turín: Einaudi, 2022.
Versiones de Nicolás López-Pérez
(Fuente: La comparecencia infinita)
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