lunes, 29 de marzo de 2021

Miklós Radnóti (Budapest, Hungría, 1909 - 1944)

 

 

Postal
 




6 de Octubre de 1944.
Cerca de Crvenka, Serbia.




A unos pocas millas a lo lejos están quemando
los  montones de heno y las casas,
y mientras, agachados en la orilla de este placentero prado,
los campesinos asustados fuman sus pipas.
Aquí, ahora, la pequeña pastora se adentra en el estanque
y juega con los plateados rizos del agua,
mientras se inclina a beber su lanuda oveja
y mira las nubes pasar nadando a la deriva.

 

 


Postal
  




24 de octubre de 1944.
Mohács.




Los bueyes babean saliva y sangre.
Nosotros todos orinamos sangre.
Somos una horda sudorosa y salvaje.
Nuestro hedor se suma al que sopla la muerte.

 

 

Última postal

 


31 de octubre de 1944.
Cerca de de Szentkiralyszabadja.
Fue el último poema que escribió. 

Caí junto a él, junto a su cuerpo entregado
y tenso como una cadena recién ajustada,
tenía un disparo en la nuca. “Así acabaré”
–me dije– “acostado e inmóvil,
como una flor que aguarda en medio de la muerte."
Entonces una voz cercana me dijo desde arriba  
florecerás de nuevo”,[1]
mientras el barro y la sangre sellaban mis oídos.







(Fuente: Poesía de El Toro de Barro)

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario