jueves, 7 de febrero de 2019

Eleni Vakaló


EL OJO DE MI PADRE


Mi padre tenía un ojo de vidrio.
Los domingos que se quedaba en casa sacaba de su bolsillo
otros ojos, los pulía con el extremo de su manga y llamaba
a mi madre para que eligiera.Mi madre reía.
.
Las mañanas mi padre estaba complacido. Jugaba con el ojo
en la palma de su mano antes de ponérselo y decía que
era un buen ojo. Pero yo no quería creerlo.
.
Echaba un oscuro chal sobre mis hombros como si tuviera
frío y era para espiar. Al final un día lo vi llorar. No tenía
ninguna diferencia con un ojo de verdad.









QUÉ HÁBITOS DE LAS PLANTAS ME ATEMORIZAN


Cuando las yemas revientan en las ramas secas
ya están plegadas dentro de ellas una por una las verdes hojas
—Quizás por eso no se sabe si las plantas realmente mueren—
porque una rama nueva
vigorosa
que florece
trepa desde la misma raíz
y toma el lugar del tallo seco
asimismo hay plantas cuya semilla cae antes de morir
y retoñan en la estación propicia
o queda su raíz
y nos da muchas otras plantas que se multiplican al año siguiente
La resistencia de las plantas me sobrecoge
Algunas avanzan con su raíz desde el jardín contiguo
Y penetran los cimientos
Un álamo nos creció así y ahora está inmenso
No se puede poner límites a las plantas
Solamente deben podarse cuando es necesario
Las plantas que todos creemos tan simples










(Traducción: Francisco Torres Córdova)




(Fuente: Meta poesía)

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