El recolector en el campo
Fruta y mujer en el mismo árbol de caqui al que me monto espantando a los pajaritos para recoger como un chico la fruta y apreciar, comiéndomela en lo alto, a la mujer que se quedó ahí abajo esperando a que subiera y ahora veo moverse entre las hojas, con sus ojos de miel, sus hombros secos, mientras me contorsiono todo al subirme entre lenguas de sol, roce de ramas, para agarrar y tirarle, del punto más extremo, el caqui más dulce.
(Los poemas de esta semana fueron seleccionados por Guilherme Gontijo Flores)
Traducción de Ezequiel Zaidenwerg
No hay comentarios:
Publicar un comentario