domingo, 29 de noviembre de 2020

Zoé Valdés (La Habana, 2 de mayo de 1959)

 

 

Respuestas para vivir

 

Hasta aquí he leído a Juana Borrero y me siento

antigua.

Y mis piernas tienen miedo de correr hacia tus ojos

cuando el retrato de mi presencia llora señales

nefastas.

Llegan las vacaciones donde nunca pude haber sido

el universo

y quedaba en el modelo del milagro,

mientras las fiebres me volvían inocente…

 

 

 

Castidad, castidad

 

Castidad, castidad, qué de crímenes

se cometen en tu nombre.

-Jaime Gil de biedma.

 

Yo nunca fui casta

regodearnos con el sexo es una hipocresía riquísima

no lo niego

pero yo nunca pude ser hipócrita yo voy al grano

directa y sin límites

sólo las sosas se las dan de interesantes

yo soy inteligente

por eso cuando quiero un hombre no lo pido con melindres

le voy pa’ arriba y lo asalto y me le aferro

pero por eso también he tenido poca suerte

porque ellos se cansan rápido de las puticas ladillosas

Yo nunca fui casta

en cuanto cumplí la edad de la pubertad

cuidé mi cutis restregándome con los machos

ni un granito me salió por exceso de masturbaciones

yo a decir verdad no andaba creyendo en virginidades

yo me crié en la calle al garete

y mi sexo iba conmigo

Yo nunca fui casta zorra sí

nadie me enseñó la malicia yo nací con ella

muy temprano empecé a latir y no masacré mi ritmo

Yo nunca fui casta ¿para qué sirve ser castos?

Si aunque sea con terror temblando de precauciones

amarnos es lo único que nos queda.

 

 

(Fuente: La parada poética)




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