lunes, 21 de abril de 2025

Juan José Saer (Serodino, Santa Fe, 1937 - París, 2005)

 Juan José Saer - Motivos


Por Clodia (Lesbia) en el cabaret

 

Sin embargo tus ojos ardían recientes bajo las drogas
fugaces y livianos como dos cirios en las sombras.
Acunabas un lobo por corazón, oh queridísima Clodia, oh Lesbia.
Abandonado elijo tu lado bueno: entre las luces
mínimas, las atroces, parecida a un meteoro,
tu cabeza bailaba y expandía como con aspas verdes
la claridad. Abandonado elijo
tu lado triste: a veces, como Dios, no estás
en ningún lado; entonces cierras
los ojos, oh Lesbia, y tiemblas como esas
grandes hojas tropicales mojadas. Abandonado
elijo tu lado esencial: nunca vuelves,
eres como una muerta obstinada, tú,
la oscura patrona del haber sido. Abandonado
elijo tu lado vuelto hacia mí: algo de cuya cara
tu corazón es el reverso.
 
 
(Fuente: Cecilia Pontorno)

 

constantino mpolás andreadis (Buenos Aires)

 

 

POEMAS EN CRUDO - 13

 

el poema es su lectura
si leerlo es escribirlo
es porque el poema se escribe solo
y sólo cada vez que se lo lee
 
el poema es todos los poemas
y a la vez es irrepetible como su
    lectura
que si es única como él
es porque su lectura es todas las
    lecturas
 
pero sólo cada vez que se lo lee
en ese instante que es eterno como
    el poema
el poema es contemporáneo del
    lector
 
que si al leerlo es todos los lectores
por el poema es que al leerlo es otro
y ese otro no es otro que él mientras
    lo lee
 
pero si el poema es su lectura
es porque el lector es él
y el hombre que lo lee no es otra
    cosa
que lo que hace que el poema sea
    él
 
que si por su lectura nunca el mismo
por su escritura sólo y siempre él
que no sólo es anterior a su escritura
sino que su escritura es aquél
    que lo lee
 
ese hombre que es todos los hombres
y que por eso mismo nunca es él
ese hombre que al leerlo lo escribe
 
no sólo para siempre sino cada
    vez
que el poema se lee y se escribe
    a sí mismo
y es otro como es otro por él el que
    lo lee
 
 

(Fuente: LITERATURACONSTANTINO.BLOGSPOT.COM)

 

Mario Jorge de Lellis (Buenos Aires, Argentina, 1922-Buenos Aires, 1966)

 Puede ser una ilustración de 1 persona

 

CANTO A LOS HOMBRES DEL PAN DURO

 

Nacen, se reproducen, después mueren.
De cobre son y el cobre los golpea.
Llevan de cobre el corazón y la camisa.
Llevan de cobre las mujeres recias.
Llevan de cobre el ojo y los abuelos.
De cobre son y suenan.
Nacen, se reproducen, después, mueren.
Y es de cobre el vapor del caldo escaso,
de cobre el duro tálamo, la higuera,
el defendible hinojo,
la charla sobre el pan, el hasta cuándo,
las mesas de hule roto, la impaciencia
por ver caras alegres, frutillas, casas propias,
amigos bajo el sol, bajo la siesta.
Nacen, se reproducen, después, mueren.
Fueron cadetes de la industria,
albañiles de andamios,
fabricantes de cosas inútiles modernas,
paladines del aire y del martillo,
fregadores de pisos, humo de chimeneas.
Nacen, se reproducen, después mueren.
¿Quién obtuvo sus sangres?
¿Quién destinó sus vértebras?
¿Quién los puso de gallos en la aurora
caminando y gritando, pateando y acatando,
hirviéndoles la sangre compañera?
Yo los he visto hastiados hasta decir no quiero,
los he visto matando en frigoríficos,
matando en primaveras
en que todo nacía sin motivo aparente
como nacen las flores;
lo he visto con bolsas,
moverse, trabajando, cuando era
la hora de comer,
la hora egregia del amor y del descanso;
los he visto trepados a las torres,
trepados a las viejas torres,
dándoles cal, charlando con los ángeles,
mirando un punto de la tierra,
un solo punto vivo
al cual pertenecían
y por el cual hilaban sus días, sus esencias.
Los he visto volviendo a sus hogares
con la honradez al hombro, mirándose las piernas,
detallándose niños y costumbres,
algunas cosas que suceden,
pisándose las huellas,
hollándose los marzos, los octubres,
los panes sin almuerzo, las amargas cosechas
del frío, las amargas recolecciones para otros
y las amargas siembras
del cobre que resuena en el alma
como un gran acordeón tocando a fiesta.
Yo sé que nacen, sí.
Yo sé: se reproducen. Yo sé: se mueren.
Sé que suenan a cobre, sé que suenan
a rasgadoras fiebres, a pan hermoso y triste.
Tienen hijos de cobre, muy sonoros;
tienen mujeres recias,
cigarrillos baratos en los dedos,
hondas causas vitales manchando sus ojeras.
Están aquí y allá.
Suenan, resuenan.
Son de una gama gris.
Andan y trepan.
Naturalmente cobres, naturalmente solos,
tienen el sol cerrado sobre la mano abierta.
Y un día caen trizados por el tiempo,
con unos ojos amplios hacia el norte
y un pan duro indicando sus presencias.
Son esos hombres duros como el cobre.
Suenan, resuenan.
 
 

Retrato de Carlos Alonso
 
(Fuente: Carlos Vitale)

Federico García Lorca (Fuente Vaqueros, España, 1898-fusilado en la carretera de Viznar a Alfacar, 18 de agosto de 1936)

 Puede ser una imagen de 1 persona

 

GACELA DE LA HUIDA

 

Me he perdido muchas veces por el mar
con el oído lleno de flores recién cortadas.
Con la lengua llena de amor y de agonía
muchas veces me he perdido por el mar,
como me pierdo en el corazón de algunos niños. 
 
No hay nadie que al dar un beso
no sienta la sonrisa de la gente sin rostro,
ni nadie que al tocar un recién nacido
olvide las inmóviles calaveras de caballo. 
 
Porque las rosas buscan en la frente
un duro paisaje de hueso
y las manos del hombre no tienen más sentido
que imitar a las raíces bajo tierra. 
 
Como me pierdo en el corazón de algunos niños,
me he perdido muchas veces por el mar.
Ignorante del agua, voy buscando
una muerte de luz que me consuma.
 
 
 
__________________________
de "Diván del Tamarit" en "Obras completas", Aguilar, Madrid, 1972. En la imagen, Federico García Lorca (Fuente Vaqueros, España, 1898-fusilado en la carretera de Viznar a Alfacar, 18 de agosto de 1936) por Martín Santos Yubero, 1932.
 


(Fuente: Jonio González)

Liv Lundberg (Bardu, Noruega, 23 de octubre de 1944 - Oslo, 22 de enero del 2022)

 Puede ser una imagen en blanco y negro de 1 persona y sonriendo

 

(escultura) 

.

una escultura en una habitación
simples elementos de materia y tiempo
ensamblarán una imagen
que se parece a ti
esta es tu imagen
punta de la nariz, lóbulo de la oreja, hueso
de la mandíbula
en la garganta están atoradas las palabras
que ninguna boca pronunció
ropas cosidas alrededor de un cuerpo,
una cartera
con documentos de identidad
quien quiera que seas
con tu rostro pálido, difuso
un certificado de nacimiento
una firma
 
sombra y sol, lo diario,
repeticiones casi mecánicas
ellos dicen saber quien eres
dicen que eres
una imagen de ti misma
te pareces a una escultura en una habitación
 
 
.
(Traducción: Esteban Moore)

(Fuente: Grover González Gallardo Poesía)

 

Saito Fumi (齋藤 史, Tokio, Japón, 1909-2002

 Puede ser una imagen de 1 persona

 

 

TRES TANKAS

 

abandonados en el campo
los guantes negros
se levantan
los dedos se vuelven amarillos
al dejar salir las flores
 
***
 
decorando
una ventana abierta
flores pintadas
que morirán
con los colores pastel
 
***
 
al llegar a una montaña
abro mis blancos brazos
para convertirme en una vela
el fuerte viento es
la canción de un ladrón de mar
 
 
______________________
en "Lynx", vol. XXIV, nº 3, octubre de 2009 / "White Letter Poems", AHA Books, 1998. Trad. del japonés al inglés, Hatsue Kawamura y Jane Reichhold. Trad. del inglés al castellano, Jonio González. En la imagen, Saito Fumi (齋藤 史, Tokio, Japón, 1909-2002 / NHK).
 
 
 
 
left in the field
even black gloves
rise up
the fingers turn yellow
as they let the flowers out
 
***
 
decorating
a display window
painted flowers
which will die out
with the pastel colors
 
***
 
coming to a hill
I unfurl my white arms
to become a sail
the vigorous wind is
the song of a sea robber
 
 
(Fuente: Jonio González)

Constatino Cavafis (Alejandría, Egipto; 29.04.1863 – 29.04.1933);

 



 

ITACA

 

Cuando emprendas tu viaje a Itaca
pide que el camino sea largo,
lleno de aventuras, lleno de experiencias.
No temas a los lestrigones ni a los cíclopes
ni al colérico Poseidón,
seres tales jamás hallarás en tu camino,
si tu pensar es elevado, si selecta
es la emoción que toca tu espíritu y tu cuerpo.
Ni a los lestrigones ni a los cíclopes
ni al salvaje Poseidón encontrarás,
si no los llevas dentro de tu alma,
si no los yergue tu alma ante ti.

Pide que el camino sea largo.
Que muchas sean las mañanas de verano
en que llegues -¡con qué placer y alegría!-
a puertos nunca vistos antes.
Detente en los emporios de Fenicia
y hazte con hermosas mercancías,
nácar y coral, ámbar y ébano
y toda suerte de perfumes sensuales,
cuantos más abundantes perfumes sensuales puedas.
Ve a muchas ciudades egipcias
a aprender, a aprender de sus sabios.
Ten siempre a Itaca en tu mente.
Llegar allí es tu destino.
Mas no apresures nunca el viaje.
Mejor que dure muchos años
y atracar, viejo ya, en la isla,
enriquecido de cuanto ganaste en el camino
sin aguantar a que Itaca te enriquezca.

Itaca te brindó tan hermoso viaje.
Sin ella no habrías emprendido el camino.
Pero no tiene ya nada que darte.

Aunque la halles pobre, Itaca no te ha engañado.
Así, sabio como te has vuelto, con tanta experiencia,
entenderás ya qué significan las Itacas.

 

traducción de Pedro Bádenas de la Peña

 

(Fuente: Aire Nuestro)