«Pregunta el camino»
El viejo camino les preguntó:
Tú que cargas sobre tus hombros
Sandalias cortadas de hojas de palma,
¿Adónde te diriges?
¿No ves el desierto
Que viene hacia ti
Con todas sus formas?
¿Por qué te esfuerzas tanto
Por pisarme descalzo?
No me ayuda tu sudor
Que gotea a un ritmo acelerado
En dirección al espejismo,
Ni tus oraciones
Ayudarán a la lluvia.
Tus pasos cojeando
Sobre mis huellas apenas me conmueven.
No van a dejar rastros
En mi piel para guiar a otros
Hasta el río. También yo, en verdad,
Me he enfermado a lo largo de los años
Por todo lo que me has despreciado. Por eso
He decidido
Aniquilarme
Por mi propia voluntad
En mis propias arenas. Sin embargo, ¿quién me
Guiará de vuelta a mí mismo
Si es que cambio de opinión?
(Fuente: Descontexto)
No hay comentarios:
Publicar un comentario