O como mierda se llame
A veces me gustaría ser una buena muchacha
provinciana, campechana, gorda,
capaz de sentarme bajo el sol en mi piel
rica en melanina, en calor y en color.
Tomar una gaseosa provinciana cuidando
de no manchar con nada mi ancha falda.
Tener un corazón enorme y puro como el de un caballo.
Lavar la ropa de todos con mis ásperas manos.
O, sino,
ser alguna de aquellas mujercitas
siempre sentaditas, inclinaditas
sobre su tejido, y haciendo punto,
calceta, o como mierda se llame.
(Fuente: Víctor O. Coral)
No hay comentarios:
Publicar un comentario