domingo, 27 de octubre de 2024

Gonzalo Rojas (Lebu, Chile, 20 de diciembre de 1916 - Santiago, 25 de abril de 2011)

 

 

Carbón 

 


Veo un río veloz brillar como un cuchillo, partir
mi Lebu en dos mitades de fragancia, lo escucho,
lo huelo, lo acaricio, lo recorro en un beso de niño
como entonces,
cuando el viento y la lluvia me mecían, lo siento
como una arteria más entre mis sienes y mi almohada.
 
Es él. Está lloviendo.
Es él. Mi padre viene mojado. Es un olor
a caballo mojado. Es Juan Antonio
Rojas sobre un caballo atravesando un río.
No hay novedad. La noche torrencial se derrumba
como mina inundada, y un rayo la estremece.
 
Madre, ya va a llegar: abramos el portón,
dame esa luz, yo quiero recibirlo
antes que mis hermanos. Déjame que le lleve un buen vaso
de vino
para que se reponga, y me estreche en un beso,
y me clave las púas de su barba.
 
Ahí viene el hombre, ahí viene
embarrado, enrabiado contra la desventura, furioso
contra la explotación, muerto de hambre, allí viene
debajo de su poncho de Castilla.
 
Ah, minero inmortal, ésta es tu casa de roble, que tú mismo
construiste. Adelante:
te he venido a esperar, yo soy el séptimo
de tus hijos. No importa
que hayan pasado tantas estrellas por el cielo de estos años,
que hayamos enterrado a tu mujer en un terrible
agosto,
porque tú y ella estáis multiplicados. No
importa que la noche nos haya sido negra
por igual a los dos.
— Pasa, no estés ahí
mirándome, sin verme, debajo de la lluvia.
 
.
«𝘝. 𝘔𝘢𝘵𝘦𝘳𝘪𝘢 𝘥𝘦 𝘵𝘦𝘴𝘵𝘢𝘮𝘦𝘯𝘵𝘰
𝘊𝘰𝘯𝘵𝘳𝘢 𝘭𝘢 𝘮𝘶𝘦𝘳𝘵𝘦» (1964)

(Fuente: Grover González Gallardo Poesía)

 

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