Lunes, y amanece.
Un mal sueño me despierta.
Hago pis.
La artrosis no duele demasiado.
Salgo al patio.
Riego cada una de las plantitas.
Las acaricio hoja por hoja.
Hago otro mate.
Pienso.
Pienso.
Hago pis otra vez.
No me falles, próstata.
Tengo todo un día por delante.
Tengo muchas decisiones que tomar.
Elijo afilar mi cuchillo.
Cabo de madera y marfil.
Piedra, quince grados de inclinación,
la mecánica de la herida.
Piedra gruesa.
Piedra fina.
Lija al agua del seiscientos.
Lija al agua del dos mil.
No puedo parar
Quince grados
Ida y vuelta
Ida, ida, ida
Quince grados
La mecánica del brillo.
Lo que mata brilla
Me refleja
Refleja el día, el sol, las plantitas, mi boca.
Amo tanto a este cuchillo,
su docilidad de fierro
su forma de reptil
sus quince grados antes de la eternidad
corta carne
corta un pelo en el aire
corta el aire y la respiración
quince grados
ida y vuelta
ida, ida, ida sin vuelta
el brillo
el tajo
el espejo del mundo
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