miércoles, 27 de julio de 2022

Galway Kinnell (Providence, Rhode Island, EE.UU., 1927-Sheffield, Vermont, EE.UU., 2014)

 

AMANECER

 

En el fango que deja la marea, justo antes de la puesta del sol,
se arrastraban docenas
de estrellas de mar. Era
como si el fango fuese un cielo
y enormes, imperfectas estrellas
lo atravesaran con la misma lentitud
con que las estrellas de verdad cruzan el firmamento.
 
Se detuvieron todas a la vez
y, como si sencillamente
su propensión a la gravedad
hubiese aumentado, se hundieron
en el fango, se fundieron en él
y allí se quedaron sin moverse, y en el instante
en que el reflejo rojizo del atardecer estalló a través de ellas,
se volvieron tan invisibles
como las estrellas de verdad cuando amanece.
 
 
_______________
de "From Mortal Acts, Mortal Words" (1980), en "A New Selected Poems", Houghton Mifflin, Nueva York, 2001. Versión de Jonio González. 
 
 
 

DAYBREAK

 

On the tidal mud, just before sunset,
dozens of starfishes
were creeping. It was
as though the mud were a sky
and enormous, imperfect stars
moved across it as slowly
as the actual stars cross heaven.
All at once they stopped,
and, as if they had simply
increased their receptivity
to gravity, they sank down
into the mud, faded down
into it and lay still, and by the time
pink of sunset broke across them
they were as invisible
as the true stars at daybreak.
 
 
 
(Fuente: Jonio González)

 

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