ÁRBOLES
Hay que aprender. Los árboles de invierno.
Ese cubrirse hasta los pies de escarcha.
Inmóviles cortinajes.
Hay que aprender la franja
donde el cristal ya humea,
y el árbol va cruzando la neblina
como los cuerpos la memoria.
Y tras los árboles el río,
las alas silenciosas de los ánades,
la cegadora noche azul y blanca
donde hay paradas cosas con capuchas.
Hay que aprender aquí los gestos
inenarrables de los árboles.
_____________________
en “El reverso de la luz: Cuatro poetas húngaros”, Universidad Nacional de Colombia, Bogotá, 2000. Trad. del húngaro Rodrigo Escobar Holguín y Vera Székács.
(Fuente: Jonio González)
No hay comentarios:
Publicar un comentario