viernes, 4 de octubre de 2024

Andrés Alencastre (Killku Warak'a, Perú, 1909 - 1984)

 


 
EL POETA PERUANO AMIGO DE GEORGES DUMÉZIL
 
 

En las reseñas sobre la vida del poeta Andrés Alencastre, mejor conocido como Killku Warak'a (1909 - 1984), lamentablemente se incide mucho en el terrible hecho de haber sido un terrateniente abusivo y autoritario que murió a manos de una turba de campesinos. 
 
Pocos saben (o dicen) que fue un magnífico profesor de Quechua en la Universidad del Cusco. Y muchos menos aun saben que mantuvo una fructífera relación amical con el historiador, filólogo, políglota y mitólogo francés George Dumézil.
 
Hemos ubicado dos textos importantes sobre Alencastre publicados por Dumézil en el famoso Journal de la Société des Américanistes de Francia. Un primer ensayo, muy especializado, sobre el quechua cusqueño, en el que rinde reconocimiento a los aportes al estudio de esa lengua hechos por el poeta peruano. Otro, mucho más poético, titulado "Deux pièces «costumbristas » Qhišwa de Killku Warak'a (Andrés Alencastre G.)", publicado en el número 43 del Journal, en 1954.
 
Además de las piezas de teatro costumbristas escritas por Alencastre y traducidas por Dumézil para dicha revista, el autor de Mito y Epopeya incluye en ese extenso artículo de más de 80 páginas, dos poemas que Alencastre le confió en 1952, cuando el francés pasó una temporada en el Cusco estudiando el Quechua y la cultura andina.
 
Aquí un fragmento de la versión castellana de uno de los poemas cedidos, hecha por el propio poeta Killku Warak'a:
 
 
 
𝗛𝗢𝗠𝗕𝗥𝗘
 
 
𝗛𝗼𝗺𝗯𝗿𝗲, 𝗲𝗹 𝗺𝗶𝘀𝗺𝗼 𝗵𝗶𝗷𝗼 𝗱𝗲𝗹 𝗦𝗼𝗹 𝗲𝗿𝗲𝘀 𝘁ú,
𝗲𝗹 𝗺𝘂𝗻𝗱𝗼 𝘁𝗼𝗱𝗼 𝗲𝘀𝘁á 𝗰𝗿𝗲𝗮𝗱𝗼 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝘁𝗶,
𝗰𝗼𝗻 𝗹𝗮 𝗽𝗼𝘁𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮 𝗱𝗲 𝘁𝘂 𝗰𝗲𝗿𝗲𝗯𝗿𝗼 𝗵𝗮𝘇𝗹𝗼 𝗳𝗹𝗼𝗿𝗲𝗰𝗲𝗿
𝘆 𝗾𝘂𝗲 𝗲𝗹 𝘁𝗿𝗮𝗯𝗮𝗷𝗼 𝘀𝗲𝗮 𝗹𝗮 𝘁𝗿𝗮𝗺𝗮 𝗱𝗲 𝘁𝘂 𝘀𝗲𝗿.
𝗛𝗼𝗺𝗯𝗿𝗲 𝗺𝗼𝗱𝗲𝗹𝗮𝗱𝗼 𝗽𝗼𝗿 𝗲𝗹 𝗖𝗿𝗲𝗮𝗱𝗼𝗿 𝗱𝗲𝗹 𝗺𝘂𝗻𝗱𝗼,
𝗱𝗲𝘁𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗳𝗶𝗿𝗺𝗲 𝘀𝗼𝗯𝗿𝗲 𝗹𝗮 𝘁𝗶𝗲𝗿𝗿𝗮
𝘆 𝗲𝘅𝗽𝗮𝗻𝗱𝗲 𝘁𝗼𝗱𝗮𝘀 𝘁𝘂𝘀 𝗳𝘂𝗲𝗿𝘇𝗮𝘀
𝗽𝗮𝗿𝗮 𝗯𝗶𝗲𝗻 𝗱𝗲 𝘁𝘂𝘀 𝘀𝗲𝗺𝗲𝗷𝗮𝗻𝘁𝗲𝘀.
𝗘𝘀 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝗲𝘀𝗼 𝗾𝘂𝗲 𝘁𝘂 𝗰𝗲𝗿𝗲𝗯𝗿𝗼
𝗲𝘀𝘁𝗮 𝗶𝗹𝘂𝗺𝗶𝗻𝗮𝗱𝗼 𝗽𝗼𝗿 𝗲𝗹 𝘀𝗮𝗯𝗲𝗿
𝘆 𝗲𝘀 𝘁𝘂 𝗰𝗼𝗿𝗮𝘇ó𝗻 𝗱𝗲 𝗴𝗿𝗮𝗻 𝘃𝗼𝗹𝘂𝗺𝗲𝗻
𝗽𝗮𝗿𝗮 𝗾𝘂𝗲 𝗾𝘂𝗶𝗲𝗿𝗮𝘀 𝗮 𝘁𝘂𝘀 𝗵𝗲𝗿𝗺𝗮𝗻𝗼𝘀.
𝗧𝗲𝗺𝗽𝗹𝗮𝗱𝗼𝘀 𝘁𝗶𝗲𝗻𝗲𝘀 𝗹𝗼𝘀 𝗻𝗲𝗿𝘃𝗶𝗼𝘀
𝗰𝗼𝗻 𝗲𝗹 𝗳𝘂𝗲𝗴𝗼 𝗱𝗲𝗹 𝗿𝗲𝗹á𝗺𝗽𝗮𝗴𝗼.
𝘆 𝗰𝗮𝗱𝗮 𝘃𝗲𝘇 𝗾𝘂𝗲 𝗲𝗹 𝗲𝗻𝗲𝗺𝗶𝗴𝗼 𝗾𝘂𝗶𝗲𝗿𝗮 𝗵𝘂𝗺𝗶𝗹𝗹𝗮𝗿𝘁𝗲
𝗹𝗼𝘀 𝗱𝗲𝘀𝗮𝘁𝗮𝘀 𝗰𝗼𝗻 𝗲𝘀𝘁𝗿é𝗽𝗶𝘁𝗼.
𝗦𝗲𝗿 𝗵𝗼𝗺𝗯𝗿𝗲 𝗲𝘀 𝗰𝘂𝗺𝗽𝗹𝗶𝗿 𝗻𝘂𝗲𝘀𝘁𝗿𝗼𝘀 𝗱𝗲𝘀𝗲𝗼𝘀
𝘀𝗼𝗯𝗿𝗲 𝗲𝗹 𝗰ú𝗺𝘂𝗹𝗼 𝗱𝗲 𝗮𝗱𝘃𝗲𝗿𝘀𝗶𝗱𝗮𝗱𝗲𝘀,
𝗮𝘀í 𝗲𝘀𝘁𝗲𝗺𝗼𝘀 𝗰𝘂𝗮𝗹 𝗠𝗼𝗰𝘁𝗲𝘇𝘂𝗺𝗮 𝗲𝗻𝘁𝗿𝗲 𝗹𝗮𝘀 𝗹𝗹𝗮𝗺𝗮𝘀;.
о 𝗰𝘂𝗮𝗹 𝗧ú𝗽𝗮𝗾 𝗔𝗺𝗮𝗿𝘂 𝗱𝗲𝘀𝗰𝘂𝗮𝗿𝘁𝗶𝘇𝗮𝗱𝗼.
𝗖𝘂𝗮𝗻𝗱𝗼 𝘂𝗻 𝗵𝗼𝗺𝗯𝗿𝗲 𝗹𝗼 𝗲𝘀 𝗱𝗲 𝘃𝗲𝗿𝗱𝗮𝗱,
𝗻𝘂𝗻𝗰𝗮 𝗹𝗼 𝗶𝗻𝗷𝘂𝘀𝘁𝗼 𝘃𝗲 𝗲𝗻 𝘀𝗶𝗹𝗲𝗻𝗰𝗶𝗼,
𝗽𝘂𝗲𝘀 𝗮𝗿𝗱𝗲 𝘀𝘂 𝗰𝗼𝗿𝗮𝘇ó𝗻 𝘆 𝗵𝗶𝗲𝗿𝘃𝗲 𝘀𝘂 𝘀𝗮𝗻𝗴𝗿𝗲
𝘆 𝗵𝗮𝘀𝘁𝗮 𝗹𝗼𝘀 𝗵𝘂𝗲𝘀𝗼𝘀 𝗹𝗮 𝗰ó𝗹𝗲𝗿𝗮.
𝗬 𝗲𝘀 𝗽𝗼𝗿 𝗲𝘀𝗼 𝗾𝘂𝗲 𝘀𝗲 𝘀𝘂𝗯𝗹𝗲𝘃𝗮,
𝘀𝗶𝗲𝗻𝗱𝗼 𝗵𝘂𝗺𝗮𝗻𝗼 𝘀𝗲 𝗵𝗮𝗰𝗲 𝗳𝗶𝗲𝗿𝗮,
𝗾𝘂𝗶𝗲𝗿𝗲 𝗮 𝗹𝗮 𝗧𝗶𝗲𝗿𝗿𝗮 𝗱𝗲𝘀𝗺𝗲𝗻𝘂𝘇𝗮𝗿𝗹𝗮
𝘆 𝗾𝘂𝗶𝗲𝗿𝗲 𝗾𝘂𝗲 𝗹𝗼𝘀 𝗵𝗼𝗺𝗯𝗿𝗲𝘀 𝘁𝗼𝗱𝗼𝘀 𝘀𝗲𝗮𝗻 𝗶𝗴𝘂𝗮𝗹𝗲𝘀...
𝗦𝗲𝗻𝘁𝗶𝗿𝘀𝗲 𝗵𝗼𝗺𝗯𝗿𝗲 𝗲𝘀 𝘀𝗲𝗻𝘁𝗶𝗿𝘀𝗲 𝗴𝘂í𝗮,
𝗲𝘀 𝗱𝗲𝗿𝗿𝘂𝗺𝗯𝗮𝗿 𝗱𝗶𝗳𝗶𝗰𝘂𝗹𝘁𝗮𝗱𝗲𝘀,
𝗲𝘀 𝗺𝗼𝘀𝘁𝗿𝗮𝗿 𝗹𝗮 𝗮𝗰𝗰𝗶ó𝗻 𝗿𝗲𝗮𝗹𝗶𝘇𝗮𝗱𝗮
𝘆 𝗲𝘅𝗽𝗼𝗻𝗲𝗿 𝗹𝗼 𝗰𝗼𝗴𝗶𝗱𝗼 𝗱𝗲𝗹 𝘁𝗿𝗮𝗯𝗮𝗷𝗼.
𝗔𝗹 𝗵𝗼𝗺𝗯𝗿𝗲 𝗱𝗲 𝘃𝗲𝗿𝗱𝗮𝗱 𝘀𝗲 𝗹𝗲 𝗰𝗼𝗻𝗼𝗰𝗲
𝗰𝘂𝗮𝗻𝗱𝗼 𝗲𝗻 𝗹𝗮𝘀 𝗴𝗿𝗮𝗻𝗱𝗲𝘀 𝗽𝗿𝗲𝗼𝗰𝘂𝗽𝗮𝗰𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀
𝘁𝗶𝗲𝗻𝗲 𝘁𝗿𝗮𝗻𝗾𝘂𝗶𝗹𝗼 𝗲𝗹 𝗰𝗼𝗿𝗮𝘇ó𝗻
𝘆 𝗰𝗹𝗮𝗿𝗼 𝗲𝗹 𝗿𝗮𝘇𝗼𝗻𝗮𝗺𝗶𝗲𝗻𝘁𝗼.
 
 
No debemos olvidar que el gran José María Arguedas reconoció, poco antes de dejar este plano tangible, que Alencastre era el mejor poeta en lengua quechua.


(Fuente: Lab De Poesía)

No hay comentarios:

Publicar un comentario