miércoles, 16 de octubre de 2024

Ramiro de Mendonça (Buenos Aires)

 

tiraré mi cabeza al mar
 
antes vaciaré su contenido para que lo coman los peces
 
pero igual quedará tan pesada que se hundirá infinitamente
y llegará a los pies de los tritones
 
fauna y flora marina
la rodearán de belleza
 
conocerá lo que no ha conocido nadie
y no podré contarlo
 
vagaré después descabezado
por los caminos y ciudades
 
no reconoceré a nadie
 
ni a él
ni a ella
 
un perro me seguirá
sin discriminarme
 
no me enteraré
pero al menos serán felices los paisajes
 
un hombre que ya no come
que ya no piensa
 
no podrá jamás extender su imperio
 
me detendré al pie del monte
y daré un dedo a mi perro
 
lo comerá feliz
 
como los peces que se encargan de mis ojos
 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario