DESCOMPOSICIÓN Y MERCADO (ELEGÍA)
DESCOMPOSICIÓN Y MERCADO (ELEGÍA)
como aquel caballo en descomposición que el mar
tiró a la playa cuando el éxtasis te visitaba.
No olía, comido por la sal.
El siglo no huele y está podrido, murió temprano (hay siglos que duran setenta años —Hobsbawm—
y otros que duran diez).
Las películas de zombis invaden las pantallas de occidente,
y en oriente fabrican millones de pantallas
pero no piensan en comer cerebros
sino en crear software
o en sentarse tras un mostrador de metal
con un celular en la mano derecha
mientras la izquierda pasa paquetes
delante del lector de código de barras.
No huele a limpieza ni, de hecho, está limpio el lugar;
se huele en cambio una prolijidad interna
como la de alguien que no está en este mundo.
En el alero colgaban gotas de gordo rocío
cuando Tu Fu desvelado vio sobre la Luna
la sombra de la espada.
Esa sombra es la silueta abismal
que ocupa el centro de este escenario en que
los enseres son transitorios
y no molesta al pensamiento la grasa
en los circuitos del aire acondicionado.
*******************************
En "El río y otros poemas", Barnacle Ed. 2019
(Fuente: Daniel Rafalovich)
No hay comentarios:
Publicar un comentario