VIEJOS NUEVOS DOLORES
La droga, amigo mío, que estoy usando a pasto
es el dolor.
Ácido, sí. Dolor ácido.
Quema como el carajo.
Quema donde toca.
Quema lo que lo contiene.
Busca fondo, busca perfora-fondo, busca salir,
el condenado.
Eso me hace pensar en los conductos
(canalejas, tuberías, cauces, zanjas)
de basalto o de mármol pulido
o de pórfido laqueado
Una serpentina que recorre por las suyas
el edificio del cuerpo mentofísico
Tienen que ser de cuarzo, de lumaquela, de granate,
resistentes al ácido.
Para explicar la subsistencia de la vida
durante décadas
con grandes cantidades de ácidos ciegos
circulando
o, de pronto, acumulándose
en lo estático,
en declives,
en las cuevas 'neutrales'-
las que no pertenecen a ningún órgano
o sistema.
Los ácidos emiten el mismo hidrógeno
invisible pero negro
que deriva por el espacio cósmico
carente de toda luz y calor
o pertenencia a lo que fuere o sea
El ácido sin 'sistema'
un término apropiado que proviene de la raíz indoeuropea
de estar
¡Cómo ha captado exactamente
esa lengua madre que dio origen
a tantas lenguas y que no se puede rehacer
de qué trata el sin sistema del hidrógeno
del ácido
del dolor!
Pero todavía no sé cómo llamar
al cuerpo-cisterna con sus conductos
(cañerías, acequias, regueras, sangraderos, cequetas
y caces), paisaje natural de esta rabia sin absolución
que viaja quemando
Hay que lograr que el tiempo siga deslizándose
Hay que lograr que el tiempo no se estanque
No se quiebre como sustancia acumulable
cristalizada como capa de hielo
que mientras tanto ahoga por falta de oxígeno
al agua
Aljibes cerrados y sin circulación
Tiempo coagulado
¡El tiempo, que es la sangre de lo existente!
"Pregunta: el ácido, ¿se apaga o se diluye?
Es importante."
Pero claro que tenemos el humor, viejo amigo.
¡A montones!
Tenemos pilas, verdaderas carradas
de humor, afluencias continuas de ríos de humor
Solo que en este momento
"por razones técnicas..."
no están entregando...
(Fuente: Idiomas olvidados)
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