En la puerta del bar
Sorda
es la noche
y mi corazón se encuentra a tono
con el universo.
En la puerta del bar compongo
una canción que no levantará polvo.
Me alegro de la vida,
de sus festines y tragedias,
en esta noche en que todo lo oigo:
rumor de papeles
que el viento arrastra por las calles,
palabras que alguien vocifera
y luego escribe
en los muros sudorosos del WC,
aullidos de monedas que se despiden
en la puerta del bar.
En la puerta del bar se detienen,
por un momento, los cometas.
No me pondrán entre rejas
por entonar esta canción.
¿Quién va a ponerme tras las rejas
por entonar una canción?
y mi corazón se encuentra a tono
con el universo.
En la puerta del bar compongo
una canción que no levantará polvo.
Me alegro de la vida,
de sus festines y tragedias,
en esta noche en que todo lo oigo:
rumor de papeles
que el viento arrastra por las calles,
palabras que alguien vocifera
y luego escribe
en los muros sudorosos del WC,
aullidos de monedas que se despiden
en la puerta del bar.
En la puerta del bar se detienen,
por un momento, los cometas.
No me pondrán entre rejas
por entonar esta canción.
¿Quién va a ponerme tras las rejas
por entonar una canción?
en
Primer Arqueo, 1989
Ediciones
El Kultrun
*
Publicado por primera vez en el suplemento literario
del diario El Sur
de Concepción, en 1978.
(Fuente: Descontexto)
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