lunes, 1 de marzo de 2021

Clayton Eshleman (Michigan, EEUU, 1935 - 2021)

 

 

En la bisagra de la creación
la deslumbrante luz de Dios se curva
para proyectar su sombra
 (las cobijas de lo oscuro
sobre las que nos echamos,
 esta bisagra
la nórdica llamada Ginnungagap
“De Vries ha interpretado la palabra ginnunga
vinculándola a la idea de ilusionismo mágico,
alterar las apariencias para confundir los ojos”.
Olson, vía Fowler, escribe:
“hombre lamido, como la vaca  
al hielo”          Authumla1
se manifiesta para alimentar a Ymir,
“una vaca opulenta, descornada”
excava un dios-bicho-humano a lengüetazos
de una rosa de hielo derretida
Es el híbrido Ymir, hermafrodita,
hijo de la mutante  
brecha
 descubierta en el Aziliense tardío?
¿El primer Mesolítico?
Para el nórdico, Ymir es el muro posterior

Ymir es el puente Paleolítico Superior,
un lapso de eternidad
a través del cual se enuncia un reciente “nosotros”,
  nosotros estamos aquí
  antes de haber estado, no yo, no yo,
  pero mi pavo real se exhibe,
 en el espejo helado bestia derretida,
uno es una mancha en las papilas de la lengua de una vaca,
 el origen retrocede,           Authumla mayormente
 está extraviada,
es niebla, y nieve, mi vaca es harapienta,
 fractal,                    es leche, vapor,
mi vaca es un dragón,             no puede ser medida,
 en la bestia licuada
soy lenguaje en la lengua del dragón,
 cualquier cosa
 puede ser porro,
las ronchas en la espalda
  de Francis Bacon son glándulas de sapo        por las cuales
el semen visionario sale de su pincel.

 

At the hinge of creation
the blinding light of God bends
to cast its shadow
(the blankets of dark
in which we toss,
this hinge
the Norse called Ginnungagap
“De Vries has interpreted the word ginnunga
as associated with the idea of deceit through magic,
with the altering of appearances to mislead the eyes”
Olson, out of Fowler, writes:
“licked man, as such, out of the ice,
the cow”        Authumla
comes into being to provide food for Ymir,
“a rich, hornless cow”
licks a god-bug-man out
of a thawing ice rose                                                                                  

Ymir is the hybrid, hermaphroditic,
child of the shape-shifting
gap,
discovered in the late Azilian?
  The first Mesolithian?
For the Norse, Ymir is the back wall‑
Ymir is the Upper Paleolithic bridge,
a span of eternity
across which a new “we” sets forth,
we are here
before we were,         not I, not I,
but my peacock display,
in the ice mirror beast melt,
one is a fleck in the papillae of a cow´s tongue,
origin recedes,      Authumla is mostly
lost,
is fog, and snow, my cow is tattered,
fractal,                   is milk, steam,
my cow is a dragon,   she cannot be measured,
in the beast melt down
I am language out on the dragon´s tongue,
anything
can be cabbie,
the weals on Francis Bacon´s
back are toad glands,           by which
visionary semen issues from his brush.

 

 

 

La constelación Aranea (fragmento)

 

Una ARANEA en el centro de su tela, flotando, pero anclada
entre suelo y cielo. La mente natural de la tierra siempre
tejiendo. Su única “decisión” es dónde comenzar la red. Un pequeño
macho entra, prueba, sondea, el hilo. En el centro del
orbe, después del acoplamiento, matan al violador.

Aracne no es Ariadna, pese a que sus figuras están entrelazadas:
la mente natural de la tierra girando siempre previene a la amante
del laberinto que el iniciado lo atravesará. En el laberinto de la vida creativa,
“el áspero combate de las dos naturalezas” puede ser sublimado
de una lucha vida/muerte a unión orgásmica con una vestal
cuyas energías lunares se encuentran en pleamar.

1963: Había una espléndida Aranea roja, verde y amarilla
concentrada en su red adherida al palosanto en el traspatio
de Okumura. Me acostumbré a colocar una silla y una pequeña
mesa bajo la red para leer. Después de varias semanas de
“esperas de araña” el tiempo empeoró, con lluvia y ráfagas
de viento. Una tarde encontré rota la red, la araña
desaparecida. Algo que solo puedo describir como
la sensación de perder un ser querido me traspasó. Lloré,
y por varios días sentí náuseas y absurdo.

Una semana más tarde, decidí viajar en moto al noroeste
de Kyoto y visitar a Gary Snyder. 

 

 

 

The Aranea Constellation (excerpt)

 

An ARANEA centered in her web, afloat yet anchored
between ground and sky. The natural mind of the earth always
spinning. Her one “decision”, where to start the web. A small
male enters, testing, sounding, the thread. At the center of the
orb, after mating, the penetrator is killed.

Arachne is not Ariadne, although the figures are intertwined:
the natural mind of the earth always spinning anticipates the
mistress of the labyrinth that the initiate is to traverse. In the
labyrinth of the creative life, “the bitter combat of the two
natures” can be sublimated from a life/death struggle to an
orgasmic union with a priestess whose lunar energies are at
flood-tide.

1963: there was a gorgeous red, green and yellow Aranea
centered in her web attached to the persimmon tree in the
Okumura backyard. I got used to taking a chair and a little
table out under the web where I´d read. After several weeks of
“spider sitting” the weather turned chill, with rain and gusting
wind. One afternoon I found the web wrecked, the spider
gone. Something went through me that I can only describe as
the sensation of the loss of one loved. I cried, and for several
days felt nauseous and absurd.

A week later, I decided to motorcycle out to northwest
Kyoto and visit Gary Snyder. 

 

 

 

Menhires (fragmento)

 

1
Roca como un grotesco huevo, de la que tambaleamos nosotros los
pecadores, el grotesco inherente. Sin principio y sin final, perfecta
a su manera, sólida y a imitación de nada. Contiene el ocre y
manganeso de mi prehistoria. Ominosa porque no puedo ordeñarla.
Ni ver a su través. Pero sostendrá mi constancia, no declinará.
Aunque sin alma, ella es genuina. Genuina en el sentido de la
pausa, un limbo estable en que podría rayar en espirales o utilizar
para cubrir a mi difunto (así, una tapadera para la olla, incluso más
grotesca, de la madre tierra). Porque perdura es sospechosa,
especialmente porque en su longevidad excede nuestro sentido del
cambio.

2
Cuando los menhires son parte de una cámara mortuoria, a veces
están grabados con curvas repetidas, o con arcos laberínticos,
algunos de los cuales aparentan ser oculetos de diosa. Es como si
los serpenteos del Alto Paleolítico, trazados con los dedos en
muros arcillosos, hubieran sido combados y ligados, arqueados,
catedralizados, puestos en ritmos átonos, de cada uno, contra cada uno,
inactivando cada uno, estanques extintos, una estasis ondulada,
la manera en que la vida viene-golpea-y se retira.
                                                                                       Charles Olson
sugirió que la poesía es el golpe devuelto del lugar, o la habilidad
de torcer el golpe en que el propio lugar ha retumbado en uno.

Los dédalos gravados en los ortostatos de Gavrinis enfatizan el
bloqueo o movimiento dentro de túneles en bucle sin entrada y sin
salida. Anticipan los portales y volutas que en sus formas de arcos
rememoran la vulva en La Ferrasie de 30,000 años de antigüedad,
en que el rizo de piedra carnal es tan leve que la receptividad de la
mujer, fundamentada, es sostenida por la vida entera de la tierra. 

 

 

 

Menhirs (excerpt)

 

1

Rock as grotesque egg, out of which we doomed sinners stagger,
the inherent grotesque. It has no beginning, no end, is in its own
way perfect, solid, not an imitation of anything else. It carries the
manganese and ochre of my prehistory. It is ominous because I
cannot milk it. Nor can I see through it. But it will support my
record, will not wither. While it is heartless, it is true. True in the
sense of truce, a stable limbo, which I may scratch spirals into or
use to cover my dead (thus a lid, for mother earth´s even more
grotesque cooking pot). Because it endures, it is suspect, especially
since its longevity exceeds our perceptual sense of change.

2

When menhirs are part of a burial chamber, they are sometimes
engraved with repeated crooks, or labyrinthine arcs, some of
which seem to be goddess oculets. It is as if Upper Paleolithic
meanders, finger-traced in wall clay, had been bent, and bound,
arched, cathedraled, placed in atonal rhythm, out of each, against
each, deadending each, died pools, a rippling stasis, the way life
comes in-hits-and goes.

                                          Charles Olson suggested that poetry is the
turned blow of place, or the ability to twist the blow that one´s own
place has reverberated in one.

The mazes engraved in the Gavrinis orthostats emphasize
blockage, or movement within looping tunnels that have no entrance,
no exit. They anticipate portals and volutes, and as arches they
remember the 30,000 years old vulva at La Ferrasie, where the
curl of fleshy stone is so soft that the receptivity of woman,
established, is held for the entire life of the earth.

 

 

 

El sabor más antiguo

 

Sitiándote en la casa, un cariño de
tu cuerpo —y existir es en seguida universal
no siempre, pero sí a menudo, tu presencia
por un instante arroja el universo a sus espaldas
por un momento eres el mundo, y entonces quizás o quizás
no, mi percepción de ti es mudable,
y estás solo en mi mente, o en mis ojos,
lo casi imposible decible es cuando
veo que la vida es buena, ese instante,
tu rodilla apareciendo de improviso
o una muestra de cualquier parte de ti, sin jerarquías,
bien puede ser tu voz, o un instante del calzado
—este instante es muy veloz y
reposado, hace casi veinte años que no atino a
dirigirlo

            *

                        Esta es la amarra más
efímera, pero va y viene—
en las noches, poco antes de dormir
te palpo como el sentir a otro es allí tierra allí
            o un vacío… o una inercia…
una aversión, un deseo de distancia, un querer estar en otra parte…
la condolencia es siempre la de la confirmación,
pero yo soy un crío poco antes de dormir,
mi deber es tocarte como un seno

            *

Esa es la razón por la que la dulzura sorpresiva de
tu presencia ofreciéndome
un instante de amor transpersonal, profundo,
ratifica más realmente
que es significativo para ser en estos días.

¿El amor, entonces, luce, para mí, entre nosotros,
sensible, fraternal, edípico, un tensar de
            la matriz?        ¿O el sentir que la matriz
no falla, en fuerza de tensor tus ojos,
de otra parte, hermosa,
de quién? Tuya.

 

 

The Oldest Flavor

 

Spotting you in the house, a dearness
of your body and being is immediately total–
no always, but so often, your presence
for a moment throws the world behind it,
or perhaps not my perception of you shifts
and you are merely on my mind, or in my eyes,
the nearly impossible sayable is when
I see that life is good, that instant,
your suddenly appearing knee,
or a show of any part of you, no hierarchy,
it could be your voice, or a moment of your shoe
–this moment is so fast and
so quiet, it has for nearly twenty years never occurred to me
to address it

 

*

                                    This is the most fleeting
mooring, but it comes and goes—
at night, right before I turn over to sleep
I touch you like a person sensing is there ground there
            or a void . . .   or a deadness
a repugnance, a willing way, a wanting to be elsewhere . . .
but I am an infant before I sleep,
I must touch you as breast

*

That is why the unanticipated sweetness of your
presence offering me
an instant of deep, transpersonal love,
is a realer confirmation
that it is meaningful to live today.

Love, then, seems, from me, through us,
sensible, fraternal, Oedipal, a tensing of
            the matrix?      Or the feel that the matrix
does not fail, in trampoline strength your eyes,
from elsewhere, beautiful,
whose? Yours.


1En la mitología nórdica, el principio de la vida fueron el hielo y el fuego, y existían solo dos mundos en el abismo Ginungagap: el congelado y oscuro Niflheim en el norte, y el caliente y ardiente Muspelheim en el sur. De la nieve derretida surgió el gigante Ymir, y una vaca cósmica llamada Audhumla también apareció. Al segundo día apareció una cabeza humana, y la vaca consigue sacar completamente al hombre lamiendo el hielo. Charles Olson hace una leve referencia a este mito del origen en The Maximus Poems II. (N. del T.)


 

 Trad. León Félix Batista  

 

Fuente: Periódico de poesía. UNAM.Mx.)

No hay comentarios:

Publicar un comentario