domingo, 25 de agosto de 2024

Ana Martins Marques (belo Horizonte, bRASIL, 1977)

 

Tres poemas sobre traducción – 

 




Traducción

 

Este poema

en otra lengua

sería otro poema

 

un reloj atrasado

que marca la hora exacta

de algún otro lugar

 

un niño que inventa

una lengua sólo para hablar

con otro niño

 

una casa de montaña

reconstruida sobre la playa

corroída poco a poco por la presencia del mar

 

lo importante es que

en determinado punto

los poemas se encuentren

 

como en ciertos problemas de física

de viejos libros de texto

 


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Por ejemplo

alguien tradujo un poema

e introdujo en él un volcán

que no estaba en el original

a causa de la métrica o por la necesidad

de una rima

alguien añadió a un poema un volcán

que antes no existía

(o una mosca, un zorro, o fue una cicatriz

la que migró de la mano izquierda a la derecha

como guantes puestos al revés

o mayo se volvió septiembre

por el mero azar de las ubicaciones geográficas

y porque para el poema era necesario

que fuera primavera

o ciruelas se trocaron

en lichis, porque las ciruelas por aquí

casi siempre se comen secas

y hacía falta una fruta

dulce y fría).

Así más o menos de este modo

creo

las personas se relacionan

con las cosas

siempre

 


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Te das cuenta

de repente

de que muchos de los poemas que amas

en realidad los escribieron

sus traductores

señores miopes

refundidos en estudios improvisados

en el cuartito del fondo

mientras sus nietos juegan en la sala a la pelota

jóvenes madres de familia

que imploran unas horas de silencio

y traducen versos largos

mientras oyen al fondo golpear

como un mar

la lavadora

profesoras jubiladas

que se ponen a verter al portugués los versos

de un viejo poeta chileno

funcionarios públicos que pasan sus horas libres

cambiando unas palabras por otras

como en una casa de cambio

doctorandos mal remunerados

autores de otros poemas

que no amas

inclinados sobre palabras

que tú nunca vas a leer

y arrojando sobre el papel

nuevas palabras

que luego serán

tus preferidas

 

*

 

Tú te metías a esos poemas

como a un mar extranjero

como esa vez que te metiste al mar

de otro continente

un mar femenino

bajo un sol femenino

y tuviste la impresión de haber abandonado

partes de ti misma

de tu vida de tu lengua de tu nombre

junto con la ropa amontonada

en la arena

 

*

 

Son muchas

tú sabes

las palabras

y esperan 

como leños apilados

pasto crecido

mercancías que aguardan el transporte

pequeños barcos de remos sin remos

máquinas que no se sabe

para qué sirven

cartas extraviadas

en el vuelo

las manchas de café en las páginas 

de un libro

todas las cosas que se hallaron en el estómago

de la morsa que murió en 1961 en el zoológico de Berlín

esperan

a que las escuches

y las dejes decir

lo que dicen

y no obstante tú no puedes

—un reguero de pólvora

y no tienes fuego—

necesitas que otro las encienda

sólo puedes calentarte en una hoguera

prestada

 

es más o menos esto

pero en otras palabras





El primer poema de esta serie pertenece a El libro de las semejanzas, de Ana Martins Marques, y se publicó en español en la edición de Kriller71 (Barcelona, 2019). Los otros dos, que no tienen título, pertenecen al libro Risque esta palavra, de Ana Martins Marques, editado por la Cia das Letras en 2021.


Foto tomada de aquí.

 

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