jueves, 1 de julio de 2021

Marguerite Duras (Vietnam, 1914 - París, 1996)

 

 

CAESAREA


 


 Caesarea

 Caesarea

 El lugar se llama así

 Caesaria

 Cesarea


 Todo lo que resta es la memoria de la historia

 y esta simple palabra para nombrarla

 Caesaria

 La totalidad.

 Nada más que el lugar

 Y el nombre.


 El suelo.

 Es blanco.


 De polvo de mármol

 mezclado con la arena del mar.


 Dolor.

 Lo intolerable.

 El dolor de su separación.


 Caesaria.

 El lugar aún se llama así.

 Caesaria.

 Cesaria.


 El lugar es plano

 de cara al mar

 el mar está al final de su carrera

 golpea las ruinas

 siempre fuerte

 ahí, ahora, ya de cara al otro continente.

 Azul de las columnas de mármol azul sentadas ante

 el puerto.


  Todo destruido.

 Todo ha sido destruido.


 Caesaria

 Cesarea.

 Capturada.

 Secuestrada.

Llevada al exilio en una nave romana,

 la reina de los judíos,

 la mujer reina de Samaria.

 Por él.


 Él.

 El criminal

 Él que había destruido el templo de Jerusalén.


 Y después la repudió.


 El lugar todavía se llama

 Caesaria

 Cesarea.


 El fin del mar

 El mar que martilla contra los desiertos

 Todo lo que queda es historia

 Todo.

 Nada sino esta rocalla de mármol debajo

 de este polvo.

 Y al azul de las columnas ahogadas.


 El mar ha ganado sobre la tierra de Caesaria.

 Las calles de Caesaria eran angostas, oscuras.

 Su frescura cedió ante el sol de las plazas

 el arribo de naves

 y el polvo de las hordas.

 En este polvo

 vemos todavía, leemos aún los pensamientos

 de la gente de Caesaria

 el trazado de las calles de Caesaria.


 Ella, la reina de los judíos,

 Regresa aquí.

 Repudiada.

 expulsada 

 por razones de estado

 repudiada por razones de estado

 retornando a Caesaria.

 El viaje a través del mar en la nave romana.

 Fulminada por el intolerable dolor de haberlo

 dejado, al criminal del templo.


En el fondo de la nave descansa entre los vendajes blancos

                              del luto.

La noticia del dolor estalla y se propaga por el mundo.

La noticia viaja sobre los mares, se propaga por el mundo.


El lugar se llama Caesaria.

Cesárea.


En el norte, el lago Tiberiano, los grandes caravasares de

       Santa Juana de Arco.

Entre el lago y el mar, la Judea, Galilea.

Alrededor, los campos de bananos, de maíz, de naranjos

del trigo de la Galilea.

Al sur, Jerusalén, hacia el Oriente, Asia, los desiertos.


Ella era muy joven, dieciocho años, treinta años, dos

mil años.

Él la llevó

repudiada por razón de estado

el Senado habló del peligro de tal amor.


Apártate de él

Del deseo por él.

Muriendo por él.


En la mañana ante la ciudad, la nave de Roma.


Muda, blanca como la tiza, ella aparece.

Sin vergüenza alguna.


En el cielo de repente estallido de cenizas

Sobre las ciudades llamadas Pompeya, Herculano


Muerta.

Lo destruye todo

Muere por ello.


El lugar se llama Caesaria

Cesárea

No queda nada para ver. Más que el todo.


Es un feo verano en París.

Frío. Brumoso.




FUENTE



Michael Bishop. Women's Poetry in France. 1965-1995.

Wake Forest University Press, 1997.


Versión del francés (con apoyo en la versión al inglés

de Michael Bishop): Robert R Rivas (c)



 (Fuente: Idiomas Olvidados)

No hay comentarios:

Publicar un comentario