Oda a Jonathan Swift
(1667-1745)
Lo que el humor no pudo
no lo tendrá la muerte.
Luz de la inteligencia,
corazón de razones,
luz de razón, el hombre
no siempre come sombra.
Propone, con modestia
(desde Irlanda, en el mundo,
hace trescientos años),
iluminar la vida,
o morirnos de risa,
al menos, de la infamia.
La muerte feliz
A lo que fue Albert Camus
Ya no tengo sorpresas de mi cuerpo,
de mi cuerpo feroz y delicado.
Porque aunque nunca hablemos de la muerte,
la Muerte es la medida en cuanto hablamos.
Negamos para ser, somos negando,
y el futuro es ayer, ayer futuro:
sólo el presente está desubicado.
Porque el voraz abismo nos transcurre
negamos para hacer, somos negados.
El instante, perpetuo Laocoonte,
Prometeo que delira, encadenado
a una nube que muerde, a una paciencia
que Sísifo soñaba. Hechos destino
a sabiendas o no, punibles, sanos.
Poderes de la lluvia
Me madrugan las gotas
cantándose en el techo.
Maimará se despierta
con calles vueltas ríos.
Rodando en la quebrada
roncan las rocas madres.
Y hay pájaros que ensayan
en las ramas mojadas.
Ruido de fondo
Las manos de la nieve
la nieve que cae en sueños
tus sueños como sombras
que asombran nuestro día
el día que no aclara
lo claro de tu risa
que ríe sin que lo sepas
saber que no eres mía
mi pequeña insistencia
que insiste en recordar
el recuerdo que vuela
volando ante el olvido
sin olvidar tu cuerpo
el cuerpo que ilumina
iluminando frondas
la frondosa alameda
álamos contra el cielo
el cielo de tu boca
la boca de la muerte
la muerte que no muere
morir de haber vivido
viviendo como vives
la vida que me das
te doy lo que me duele
el dolor padre y madre
la madre amante hembra
las hembras junto al fuego
el fuego que es la especie
la especie está en peligro
peligran nuestros miedos
los miedos luto en flor
Florencia nunca nunca
nunca será Las Vegas
ni veo en Delfos lumbres
para alumbrar Wall Street
estrías del planeta
planetas que se extinguen
extintos valles fértiles
fértiles sueños manos
las manos que se aman
al amor de lo hecho
hacer lo que se pueda
poder hablar decir
te digo lo que canto
cantar como las manos
manos que construyeron
construir sobre el abismo
abismos que se abren
y abriéndose se cierran
sobre gargantas libres
libertad y justicia
justicia entre las manos
las manos de la nieve
(Fuente: Círculo de poesía)
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