El retorno del bicho
Hubo otra vez un insecto
que se escapó de ser hombre
y se exilió por su cuenta a su isla florida
para pensar en la cueva del casino
cómo volver al hogar presidencial
se sentía ofendido, pero cobró voluntad
poco a poco pata a pata
fue nadando a tierra firme
decidido a la venganza para hacerse respetar.
Con las antenas atentas escuchó a lo lejos
eso que llamaban derechos humanos
y se echó a reír como lo hacía antaño con tranquilidad.
De una libre empresa
se robó enormes partidas de odios y gorras
promesas y drogas
para repartir en su campaña electoral.
Convocó a periodistas a turistas
a partidos de fútbol a sillas eléctricas
a bombas de huraños a caños de fusiles
del sur y del norte del este y de aquel
les habló de la patria grande del viaje a la luna
del espanto de la China-na-na-
que iba a regalar.
Insectos de la guardia vieja lo vitorearon a grito pelado
con cuernos y banderas pintados y excitados
subieron la colina y bajaron con la ofrenda:
el burro quemado.
(Fuente: Adam Gai)
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