CHORINHO DULCE
Ya tuve y perdí
una casa,
un jardín,
un umbral,
una puerta,
un marco de ventana con un perfil.
Sabía una modinha y no la sé más.
Cuando la vida da descanso, vuelvo a querer
el umbral,
el portal,
el jardín
más la casa,
el marco de la ventana y aquella cara abandonada
Todo imposible, todo de otro dueño,
todo de tiempo y viento.
Entonces me da por llorar, horas y horas,
el corazón ablandado como un higo en almíbar.
…
CASAMIENTO
Hay mujeres que dicen:
Mi marido, si quiere pescar, que pesque,
pero que limpie el pescado.
Yo no. A cualquier hora de la noche me levanto,
ayudo a descamar, abrir, cortar y salar.
Es tan bueno, nosotros solos en la cocina,
de vez en cuando los codos se tropiezan
él cuenta cosas como “éste fue difícil”,
“plateó en el aire dando coletazos”
y hace el gesto con la mano.
El silencio de cuando nos vimos por primera vez
atraviesa la cocina como un río profundo.
Por fin, el pescado en la bandeja,
vamos a dormir. Cosas plateadas estallan:
somos novio y novia.
…
METAMORFOSIS
Fue así que mi padre me dijo una vez:
estás hecho un caballo viejo buscando la gruta.
Las cigarras aferraban las patas a los troncos
y zumbaban con decisión su silbido.
Los árboles cantaban en el patio,
renovadas las hojas de un verde novísimo.
Expandí las narinas y fui a pastar
con mi cabeza minúscula.
Lo más caliente y amarillo que puede ser,
era el sol, un día de pura luz.
Mugí entre las vacas, antediluviana,
sé de arbustos, agua que encontré y bebí.
Al volver sacudí el cuello y la cola.
Quedaron solo dos señales:
un modo goloso de olfatear lo verde;
un modo de pisar, solo pezuña y piedras.
…
(Fuente: La Parada Poética)
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