viernes, 19 de noviembre de 2021

Raymond Queneau (Francia, 1903-1976)

 

A los otros

 

Porque apreciáis estos huesos en la tempestad
estos huesos rotos molidos batidos por los guijarros
estos huesos congelados más secos que las raspas
y nosotros no

porque admitís la miseria infernal
y los demonios surgidos de los lagos
las máscaras carmesís las danzas sepulcrales
y nosotros no

porque aceptáis los buitres que sobrevuelan
asesinando el cielo con su cuello desplumado
paladeando el jugo de los osarios bullentes
y nosotros no

porque aprobáis que se arranquen los dientes
la argolla que recubre el cuello del prisionero
las patadas y azotes de fusta
y nosotros no

porque admitís al pobre y al rico
y el mal y el bien y la limosna y el puño
y al rey en su trono y al idiota en su nicho
y nosotros no

porque aplaudís a los mejores y a los peores
a los monos con galones a los monos a dos patas
a los alces los chacales los camellos y buitrones
y nosotros no

porque toleráis la bondad de la pobreza
la maldad del infierno la dulzura de la cárcel
la desgracia eterna la imbecilidad crasa
y nosotros no

porque decís sí a los miserables

porque mojáis el pan en nuestra sopa

porque os bebéis el alcohol de nuestro vino
 
 


en El instante fatal (1946) (Visor Libros, Madrid, 2009, trad. de Adolfo García Ortega).
 
 
(Fuente: Asamblea de palabras)

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario