CHIRIGUARE
de Ricardo Rojas Ayrala
contiene las 833.331 lágrimas
que derramé por vos
como un memorioso
cocodrilo del Chiriguare.
Lágrimas amargas como la hiel
y algo más que el pomelo de la China.
Tan desesperadas lágrimas
de un montuno eligiendo raíces frescas,
mejor de un indeterminado del Cuzco con flores,
mejor de un insólito promesante huyendo
de las infinitas lagunillas del más puro jaspe,
mejor de un brioso bailarín casi casi pow-wow,
mejor de este mercachifle aguardando en el andén,
mejor de un destartalado a quien le juran
y perjuran que el Pedro Páramo
es una novela de amor.
Y vos me ignorás;
me ignorás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario